Tolerancia cero y huellas dactilares

Pilar Campo REDACCIÓN

DEPORTES

El reglamento de venta de abonos y entradas es estricto en la regulación de las gradas de animación

21 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La lucha contra los comportamientos que promuevan la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el fútbol profesional es una máxima en la que están comprometidos tanto los clubes como las Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado, interesados en lograr una convivencia pacífica entre las aficiones del Real Oviedo y el Sporting de Gijón. Ahora que ambos equipos coinciden de nuevo en la Segunda División, después de 14 años, su máximo objetivo irá encaminado a conseguir que todos los partidos que disputen se desarrollen con la máxima deportividad, tanto dentro como fuera del estadio. Y uno de los instrumentos claves para combatir las actitudes incívicas e incrementar esos niveles de seguridad deseables es el reglamento de venta de abonos y entradas.

Controles severos de seguridad

Este reglamento deja claro que todos los aficionados que adquieran un abono de temporada para asistir a una grada de animación estarán fichados, de tal manera que estarán permanentemente controlados, no sólo porque en las oficinas del club dispondrán de sus datos de filiación y contacto, sino que además estarán «en una zona del recinto sectorizado y diferenciado del resto del aforo, con accesos preferentemente exclusivos al sector, zona o graderío y tendrán instalado el sistema de acceso mediante reconocimiento biométrico». Es decir, su huella dactilar será la que le permitirá entrar al estadio, de tal forma que es su seña y ésta es personal e intransferible.

Además, el club establecerá tanto en el documento de adquisición del título de acceso, como en el reglamento interno correspondiente que, en esas zonas, los espectadores se someterán a todos aquellos controles de verificación de identidad vigentes en cada momento, incluyendo «aquellos relativos a sistemas automáticos de carácter biométrico, así como de exhibición del título de acceso junto al documento acreditativo de su identidad». Una condición indispensable para poder entrar al campo, ya que, tal y como se contempla en el reglamento, se denegará el acceso al estadio en el caso de que la persona no aporte, si es requerido para ello, junto con el dato biométrico, su DNI. Estos dos elementos deben coincidir con los datos que constan en el club y que facilitaron en el momento de su expedición.

Normas estrictas de acceso

Un preámbulo, siete artículos, una disposición adicional, una transitoria y dos finales conforman el Reglamento de venta de abonos y entradas. Este reglamento es muy estricto en cuanto a las normas que se establecen para los partidos declarados de alto riesgo. En estos últimos casos, se aplicarán una serie de medidas, sin perjuicio de aquellas que pueda establecer la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte.

Entre otras medidas se contempla que se reducirán a cuatro el número de entradas que pueda adquirir cada persona; no se venderán entradas en las taquillas del estadio en el mismo día de celebración del partido y en el supuesto de que la Comisión Estatal imponga la implantación de sistemas de emisión y venta de entradas que permitan controlar la identidad de los adquirentes de las entradas por parte del club organizador se dispondrá lo necesario para realizar los controles de identidad precisos en el momento del acceso al recinto deportivo.