El Liverpool se cita con el Madrid en la final de Kiev

Agencias

DEPORTES

PAUL ELLIS

Los de Klopp caen por 4-2 en Roma en un partido vibrante y marcado por la polémica arbitral pero hacen valer el resultado de la ida en Anfield

03 may 2018 . Actualizado a las 07:36 h.

El Liverpool se clasificó para la final de la Liga de Campeones del fútbol europeo pese a perder hoy como visitante por 4-2 ante la Roma, al hacer valer el 5-2 que había logrado en el encuentro de ida.

En un estadio Olímpico romano colmado, el senegalés Sadio Mané abrió el marcador para los visitantes a los 9' y James Milner, en contra de su arco, igualó para la Roma a los 15'. El Liverpool volvió a adelantarse a los 25' por intermedio del holandés Georginio Wijnaldum hasta que el bosnio Edin Dzeko a los 52' igualó.

Sobre el final, el belga Radja Nainggolan, primero a los 86' y luego en tiempo de descuento con un penal, selló el resultado definitivo, aunque la Roma ni siquiera tuvo la oportunidad de volver a tocar la pelota para buscar el tanto que le faltaba para llegar a la prórroga.

Por más que el encuentro tuvo un ritmo intenso y ocasiones de gol frente a los dos arcos, sobre todo frente al del Liverpool, a la definición le faltó un poco de suspenso por la gran ventaja que siempre tuvo el conjunto inglés.

De esa manera, los «reds» quedaron a las puertas de su sexta corona en Europa, que podrán lograr el 26 de mayo en Kiev ante el Real Madrid, que el martes eliminó con mucho más sufrimiento al Bayern Múnich. La final será una reedición de la definición de 1981, cuando el Liverpool se impuso 1-0 al club blanco y festejó por tercera vez el título europeo.

El lastre para la Roma era muy grande tras el 5-2 en la ida, pero el conjunto dirigido por Eusebio di Francesco se amaparaba en el antecedente de los cuartos de final cuando remontó un 4-1 ante el Barcelona para ilusionarse.

Sin embargo, el Liverpool dejó en claro rápidamente que no iba a dejarse sorprender y que iba a lastimar cada vez que tuviera la oportunidad.

Por eso, tras algunos sofocones frente a la valla defendida por Karius, el conjunto dirigido por el alemán Jürgen Klopp empezó a sentenciar la eliminatoria con un rápido contragolpe a los nueve minutos.

Nainggolan perdió un balón en su terreno y Firmino aprovechó para emprender una veloz carrera hacia el área rival que Mané coronó con una definición ajustada ante la salida de Allison.

De esa forma, el conjunto inglés neutralizó la euforia de un estadio que hasta ese momento creía en la remontada.

Sin nada que perder, la Roma prosiguió con su ataque alocado y muy pronto tuvo su premio, con un gol que le devolvía las esperanzas. Stephan El Shaarawy ganó de cabeza en el área rival y Lovren intentó despejar, con tanta mala fortuna que la pelota rebotó en la cara de Milner y se metió en la valla de Karius.

El juego recobró intensidad, con una Roma volcada al ataque y un Liverpool dispuesto a responder con rápidos contragolpes. Todo el interés estaba pendiente en ver quién era el que acertaba primero frente a la portería rival.

Y de nuevo fue el Liverpool, que aprovechó por intermedio de Wijnaldum un despeje fallido de Dzeko en un corner para aumentar su ventaja en la eliminatoria.

A pesar de la diferencia, la Roma pareció focalizarse sólo en el partido. Por eso no sintió el impacto de un nuevo gol y continuó con su búsqueda ofensiva. Un tiro de El Shaarawy pudo darle el empate transitorio, pero el palo devolvió su intento.

Sin embargo, en el inicio de la segunda parte, Dzeko tuvo su revancha personal para convertir el 2-2, después de capturar un rebote de Karius tras un remate de El Shaarawy.

Con una búsqueda casi ciega, la Roma siguió entusiasmando a su afición con un juego de ataque que desnudó muchos problemas defensivos en el conjunto inglés. Sin embargo, la falta de acierto frente al arco rival no permitió que los «giallorossi» se ilusionaran realmente con la posibilidad de concretar la remontada.

Dzeko, El Shaarawy y Shick tuvieron sus ocasiones para poner en ventaja a la Roma, que igualmente dejó espacios para que el Liverpool también pudiera convertir otro gol.

Nainggolan, con un soberbio remate desde afuera del área y un penal en el tercer minuto de tiempo de descuento, le dio el premio consuelo de la victoria a la Roma, pero no alcanzó para si siquiera forzar la prórroga.

Al conjunto inglés le alcanzó con la renta de la ida para asegurarse su plaza en Kiev y poder pensar en la final ante el Real Madrid.

4 Roma: Alisson, Florenzi, Manolas, Fazio, Kolarov, Pellegrini (Ünder, min. 53), De Rossi (Gonalons, min. 69), Nainggolan, Schick, Dzeko y El Shaarawy (Antonucci, min. 75).

2 Liverpool: Karius, Alexander-Arnold (Clyne, min. 92), Lovren, Van Dijk, Robertson, Wijnaldum, Henderson, Milner, Salah, Firmino (Solanke, min. 87) y Mané (Klavan, min. 83).

Arbitro: Damir Skomina (Eslovenia). Tarjetas amarillas a Lovren, Florenzi, Robertson, Manolas y Solanke.

Goles: 0-1, min. 9: Mané.

1-1, min. 15: Milner, en propia puerta.

1-2, min. 25: Wijnaldum.

2-2, min. 52.: Dzeko.

3-2, min. 86: Nainggolan.

4-2, min. 93: Nainggolan, de penalti.

Incidencias: Partido de vuelta de semifinales de la Liga de Campeones, disputado en el Olímpico de Roma. Lleno.

 Real Madrid-Liverpool, ¿revancha 37 años después?

Real Madrid y Liverpool se medirán el 26 de mayo por el título de la Liga de Campeones de fútbol, una final con dos clubes históricos que desempolvará además más de un video y mil anécdotas de 1981.

El Liverpool eliminó hoy a la Roma pese a perder 4-2 en el estadio Olímpico de la capital italiana gracias al 5-2 de la ida, mientras que el Real Madrid se deshizo el martes del Bayern Múnich por un global de 4-3. Ingleses y españoles se citaron para la final en el Estadio Olímpico de Kiev.

Por historia y por el pasado más reciente, el Real Madrid aparece como el favorito. El equipo entrenado por Zinedine Zidane y liderado por Cristiano Ronaldo busca su tercera Champions consecutiva y la cuarta en cinco años. Sería además la décimo tercera en el palmarés del club.

El último equipo que ganó tres veces seguidas la máxima competición de clubes del mundo fue el Bayern entre 1974 y 1976. En el fútbol moderno no se ha visto nada similar a este Real Madrid, pura fiabilidad en Europa.

De hecho, el conjunto español ha ganado las últimas seis finales de la Copa de Europa que ha disputado, 1998, 2000, 2002, 2014, 2016 y 2017. Para ver al Real Madrid perder una final hay que rebobinar 37 años.

Fue el 27 de mayo de 1981, en el Parque de los Príncipes de París. ¿El rival? El Liverpool, que se impuso 1-0 con un gol de Alan Kennedy en el minuto 82.

«El Liverpool actual y el nuestro sólo se parecen en que íbamos de rojo. Entonces éramos, con mucha diferencia, el mejor equipo del mundo», recordó recientemente en una entrevista con «El Mundo» Michael Robinson, integrante de aquel Liverpool y actualmente comentarista en España.

En efecto, aquel Liverpool tenía a jugadores como Kenny Dalglish, Ray Clemence, Alan Hansen, Phil Neal o Graeme Souness. Aquella generación irrepetible de jugadores «reds» ganó la Copa de Europa en 1977, 1978, 1981 y repetiría éxito en 1984. La última de las cinco coronas del club llegó en 2004.

En el Real Madrid jugaban Carlos Santillana, Juanito, Vicente del Bosque, José Antonio Camacho y Uli Stielike, pero no tenían ni mucho menos el currículum de sus rivales. El Real Madrid tenía ya seis Copas de Europa, pero la última databa de 1966.

El fútbol ha cambiado mucho en 37 años, pero Real Madrid y Liverpool siguen siendo dos de los clubes con más mística e historia. Y actualmente cuentan con dos equipos llenos de talento.

Por eso, no cabe esperar otra cosa que no sea una final espectacular. Por un lado, están Cristiano Ronaldo, Sergio Ramos, Luka Modric, Toni Kroos, Karim Benzema o Marco Asensio. Por otro, Mohamed Salah, Sadio Mané, Roberto Firmino o James Milner.

Son dos equipos de los más goleadores del mundo que rara vez especulan. Y en el banquillo hay dos colosos: Zidane se ha convertido en maestro en apenas dos años y medio y Jürgen Klopp convierte en oro todo lo que toca.