Lewis Hamilton: «Aún siento al niño que hay en mí»

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Mark Thompson | AFP

El líder del Mundial muestra su cara más humana mientras acaricia su nuevo título

21 oct 2018 . Actualizado a las 18:55 h.

Lewis Hamilton no tiene ningún tipo de duda: lo mejor está por venir. Y el británico no se refiere a lo que podría suceder este fin de semana en Estados Unidos, donde buscará ganar su quinto título de fórmula 1. De momento, se vio superado en los entrenamientos por Sebastian Vettel, que logró el mejor tiempo, aunque saldrá desde la cuarta posición, al haber sido sancionado con pérdida de tres puestos por ir a más velocidad de la permitida durante una bandera roja. Tras la recomposición de la parrilla, la pole es para Raikkonen y el segundo puesto para Hamilton. El británico será campeón si gana hoy (20 horas, Movistar fórmula 1) y Vettel no queda segundo. A la hora de cierre de esta edición aún no habían finalizado los entrenamientos de ayer por lo que no había parrilla.

«Mis 30 están siendo hasta ahora los mejores años de mi vida. No me siento viejo, me siento superjoven, todavía siento al niño que hay en mí». El piloto de 33 años tendrá la posibilidad de igualar en Austin los cinco títulos del argentino Juan Manuel Fangio y quedar apenas dos por detrás del récord de siete del alemán Michael Schumacher. Sin embargo, el británico también se da tiempo para reflexionar sobre su vida como superestrella, sus proyectos después del retiro y sus vínculos con Estados Unidos.

-En las redes sociales ha difundido últimamente mensajes motivacionales. ¿Por qué?

-Cada día me doy más cuenta de la plataforma y la voz que me dan las redes sociales. Estoy intentando comprender cómo enviar el mensaje correcto. Hay mucha gente en las redes sociales que simplemente hace tonterías. Eso puede ser gracioso a veces, pero el mayor poder es ser constructivo. Siempre leo los comentarios de las personas que lo pasan mal y luego les doy las gracias y escribo: realmente lo necesitaba. Comprender esta influencia es entender tus propias habilidades y usarlas mejor.

-¿Cómo vive ser un modelo o incluso una inspiración para otros?

-Me pone la piel de gallina. Después de todos estos años, es cierto que en la vida cotidiana no soy consciente de la influencia que tengo. Cuando veo que otros me consideran una fuente de inspiración, eso me afirma en mi trabajo.

-¿Hasta qué punto puede ser también una carga?

-No me parece una carga, es un privilegio. Por supuesto que se puede ver de otra manera, pero eso significaría considerar el vaso medio vacío. Lo veo medio lleno.

-¿Le gusta ser famoso?

-A veces ves gente en la televisión que solo quiere fama rápida. No pensaba en nada de eso cuando era niño. Solo quería correr. En su momento, vi a Ayrton Senna solo como piloto de carreras, no como una persona famosa. No conecté con eso. Ahora tengo cierta fama, tan simple como eso. Así que debería disfrutarlo de alguna manera. Me llevó mucho tiempo entenderlo. ¿Si lo disfruto? Es genial cuando los niños y los adultos de repente quieren sorprenderte, te buscan, se toman fotos contigo. Pero no es un incentivo para mí, forma parte del paquete global y, desde luego, no es la mejor parte.

-Ya es una superestrella más allá de la fórmula 1. ¿Le puede ayudar esto a preparar el siguiente paso de su vida?

-Sin duda. La fórmula 1 me ha llevado a ser quien soy y me ha dado la oportunidad de hacer también otras cosas. El deporte es la base, no podría realizar mis otros proyectos si no tuviera esa plataforma. Pienso mucho sobre el futuro. El automovilismo está en el centro absoluto, siempre quiero seguir mejorando. Si eso marcha bien, entonces podrán florecer otras cosas. Es verdad que también he plantado semillas en otros lugares y ahora quiero ver qué nace ahí. Intento construir un imperio (en los negocios).

-¿Es alguien como su jefe Toto Wolff, un hombre de acción, un ejemplo a seguir en este camino?

-Lo hago a mi manera. No me veo como un duro hombre de negocios. Lo mío son las buenas relaciones, la confianza, el respeto. Pienso que he tomado buenas decisiones en la elección de mis proyectos, tengo un buen olfato. Por ejemplo, mi cambio a esta escudería. No fue casualidad que hayamos tenido tanto éxito. Fue parte de un plan.

-Alguna vez dijo que le gustaría mostrar una visión diferente de las cosas en un libro. ¿Cómo sería eso?

-Siempre hay más que contar de tantas cosas. Pero deberá esperar a que aparezca el libro, no es algo que sucederá ahora. Publiqué un libro hace un tiempo y fue algo realmente laborioso. Todos los años tengo ofertas para publicar libros y siempre lo rechazo. Prefiero concentrarme en otras cosas. Un día escribiré mi propio libro y mi propia versión de la historia. Pero espero que sea dentro de un tiempo todavía.

-La próxima temporada será el piloto más veterano de la parrilla después de Kimi Räikkönen (39 años). Está batiendo récords, también de Michael Schumacher. ¿Cómo se siente estar entre estas leyendas?

-Se siente muy extraño. Estoy todavía ahí, en la mitad del asunto, por lo que no lo miro tanto. Pero es genial poder ser comparado con grandes del deporte. Me acuerdo cuando llegaba a las carreras con mi padre y nadie se interesaba por nosotros, no éramos nadie. Veíamos las carreras de Senna por televisión y nunca me imaginé poder ser mencionado a la par. Es algo completamente increíble.

-Con pocos recursos, ha podido construir una carrera a partir de del kárting. ¿Es una carrera así posible hoy en día?

-La fórmula 1 y el deporte del motor son cada vez más caros. Cuando recuerdo lo que ganaba mi padre, pienso que hoy probablemente no hubiéramos podido comenzar con el kárting. Si piensas en Muhammad Ali, en Mike Tyson, ellos vinieron de la calle. Debieron darlo todo, venían de las condiciones más básicas, tuvieron que luchar, sufrir el dolor. Ese hambre cruda y natural no se puede superar. Algunos se sentaban en un Lamborghini mientras mi padre y yo conducíamos un Fiat 500. Yo pensaba entonces: disfrútenlo, pero nunca ganarán la carrera.

-En Austin ganó cinco carreras de las seis carreras disputadas. ¿Qué es lo que le gusta del circuito?

-El circuito es maravilloso. No soy un gran fan de las nuevas pistas, pero esta realmente me gusta. Me gustan los circuitos que permiten correr, los duelos entre dos, la elección de diferentes líneas. Siempre los voy a recibir de manera fantástica.

-Estados Unidos es en estos momentos un país dividido. ¿Cómo lo vive?

-Eso siempre ha sido así, solo que ahora más fuerte. La gente solo se pronuncia más abiertamente porque ve que los otros también lo hacen.

-¿Viviría en Estados Unidos?

-Siempre he amado América. Siempre quise vivir aquí cuando de pequeño miraba las películas americanas. Recuerdo mi primera vez en Nueva York. Mi madre y yo estuvimos ahí tres días y ella tuvo que ahorrar mucho dinero para poder estar ahí. Y entonces todo fue como en la televisión, con los taxis, el Empire State. Realmente me gustó. Pero en la situación actual, no sé si sería el lugar adecuado para mí.

-¿Se refiere al factor Donald Trump?

-No, no tanto eso. Como piloto de fórmula 1 sería de todas formas imposible vivir tan lejos de la fábrica.

-Una importante frase para usted es «Still I Rise» («Sigo creciendo»). ¿Sus mejores tiempos aún están por llegar?

-Creo firmemente que lo mejor está por venir. Me esperan muchos días mejores. Si sigo sano, por supuesto. Más carreras, más éxitos con este equipo, más experiencias con mi familia, nuevos campos de negocios, incluso construir una familia. Hay tantas cosas grandiosas que me esperan. Las posibilidades de crecer que tenemos cuando tenemos más edad, aventuras que me estimulan... valoro mi vida y mi tiempo más de lo que he hecho nunca. Por eso me esfuerzo realmente para dar lo máximo. Hace poco pasé un gran momento jugando un par de horas al tenis con mi padre y mi hermano. Fue uno de los grandes momentos del año para mí. Esos pequeños momentos me dan fuerzas durante semanas.