Cuando Ramos apague la luz

DEPORTES

Rodrigo Jiménez | EFE

15 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

A Hermoso le cambió la vida un saque de esquina. Centró Saúl Berjón, cabeceó Mauro, y Kike García, sobre la línea, empujó al Castilla a Segunda B. Entonces aún tenía dos filiales el Madrid, pero el efecto dominó del doble descenso se llevó por delante al C. Florentino Pérez consideró que Tercera no era lugar para un representante del club blanco e hizo desaparecer al incómodo dependiente, obligando a sus jugadores a abandonar la capital. El lateral izquierdo no quiso perderse de vista, y se enroló a préstamo en el Valladolid. Allí, los bandazos de Garitano, Portugal y Alberto en un conjunto sin rumbo sacaron varias veces a Mario Hermoso del carril. El futbolista que estrena España junto a Brais Méndez empezó a hacerse central en Pucela, durante el turbulento curso 15-16. Solari lo consolidó en la plaza en cuanto concluyó la cesión. El Solari que dirigía al ya exclusivo filial merengue y ahora ve con buenos ojos robarle a Hermoso al Espanyol. Las lagunas de Varane y la inconsistencia de Vallejo reclaman nueva compañía para Nacho y el capitán. Un zurdo que además pueda relevar de emergencia a Marcelo. Un futbolista multitarea, como Ramos, que también entró a Madrid por un costado.

El camero se ha ido quedando solo en la selección; han ardido ya todos los compañeros de Viena. Antes se quemaron los testigos de la primera función. En el descanso del Helmántico, frente a China, se retiró Torres y se estrenó Mista; se retiró Puyol y debutó él. Saltó al campo con Valerón. Qué tiempos. Marzo del 2005. Valerón. Aquel día, Aragonés mediante, a Ramos le tocó carril, que entonces era lo suyo, como lo de Puyol. Cinco años después, Puyol, que ya solo era central, ganó el Mundial sometiendo a Alemania con uno de esos impulsos que te dejan abrazado a la copa desde la semifinal. De los que valen también por una Champions en Lisboa. Marca de una especie a cuya extinción se resiste Hermoso, que empieza con tiempo el rodaje para cuando Ramos apague la luz.