A dos meses de retirarse, Ferrer da una lección en Miami

La Voz

DEPORTES

RHONA WISE | EFE

El español, que abandonará la práctica profesional al concluir la temporada, vence al número 3 del mundo, Alexander Zverev

25 mar 2019 . Actualizado a las 08:13 h.

No quiere marcharse por la puerta de atrás y la de esta madrugada, en Miami, es una prueba más. El español David Ferrer ha dado la sorpresa al eliminar en segunda ronda del torneo de Miami (Estados Unidos), segundo Masters 1.000 de la temporada, al número tres del mundo, el alemán Alexander Zverev (2-6, 7-5, 6-3), una hazaña que le permite citarse en tercera ronda con el estadounidense Frances Tiafoe.

Con 36 años y a dos meses de su retirada, el alicantino, hundido en el puesto 155 del ranking ATP, fue capaz de doblegar a un 'Top 3' por primera vez desde Montecarlo 2014, cuando ganó a su compatriota Rafa Nadal. Una 'wild card' le dio su billete al torneo y ahora deja por el camino a un rival 15 años más joven que él.

Sin embargo, el de Jávea tuvo que remontar después de un primer set adverso, donde tras intercambiarse dos golpes Zverev enlazó tres juegos ganados consecutivos para llevarse el parcial. Ferrer inició la segunda manga rompiendo, pero el germano la neutralizó en el octavo juego.

El español aguantó el tipo y fue capaz de adjudicarse el set con un nuevo 'break' en el undécimo, y todo tuvo que decidirse en el tercer parcial. Después de defenderse de hasta cuatro bolas de rotura, Zverev cedió en la quinta, y Ferrer no perdonó; otro quiebre en el juego que cerraba el duelo le dio la victoria tras dos horas y 22 minutos.

«La verdad que sí, este triunfo no estaba dentro de mis planes. Estoy viviendo mi mejor torneo del año y lo mejor de todo es el cariño de la gente», reconoció Ferrer tras el partido. «No pedí 'wild card' porque sabía que había gente joven y no quería quitársela a jugadores que la merecían más, pero el torneo me la dio. Quiero darle la gracias y qué mejor manera que en un ambiente como este», añadió.

Ahora, se enfrentará en tercera ronda, en busca de un puesto en octavos, con el local Frances Tiafoe, que llega tras vencer al serbio Miomir Kecmanovic (7-6(6), 7-6(5)).

«Esto significa mucho para mí»

Ferrer, que superó la perdida del primer set, explicó que la clave del triunfo estuvo en la manera como planteó el partido, y que no fue otra que darlo todo en el campo y disfrutarlo al máximo. «Es un día especial porque es el último año de tenis profesional para mí. Ganar este tipo de partidos contra un jugador del Top 10 como Sascha es un regalo».

«Estoy muy contento y tratando de disfrutar cada punto y cada momento», explicó Ferrer, que acabó el partido con 93 puntos ganados por 91 de su rival. «Nunca sentí la presión del marcador y si me centré en el juego, especialmente en los tantos decisivos, que hicieron la diferencia».

«No quiero pensar en lo que pueda suceder el lunes, lo que si quiero es disfrutar del momento, y estar listo para salir de nuevo a la pista e intentar dar lo mejor de mi», destacó Ferrer, quien reiteró que se encontraba en su último año como profesional.

De ahí que cada partido tendrá un significado, que en el caso del duelo ante Zverev, el séptimo como profesional (3-4), le dio una proyección «diferente».

Ferrer, exnúmero 3 del mundo, admitió que el tener ya asimilado que éste será su último año como profesional no significa que no salga a la pista a competir al máximo.

«Mi motivación es jugar a un alto nivel y ser competitivo. Es mi objetivo», subrayó Ferrer, que fue finalista del torneo en la edición del 2013. «Ya no puedo jugar a mi mejor nivel, pero quiero tener buena energía y jugar lo mejor en cada partido y eso fue lo que sucedió aquí, esta noche, algo que me hace inmensamente feliz».

Además, Ferrer se convierte en el tercer jugador español que logró pasar a la tercera ronda después que en la jornada del viernes también lo consiguieron Roberto Bautista Agut, vigésimo segundo cabeza de serie, y Albert Ramos-Vinolas