Koeman comienza en el Barça abriendo la puerta a quien no tenga hambre

P. Ríos COLPISA

DEPORTES

Alejandro Garcia | EFE

El entrenador holandés firmó hasta 2022, garantizó «trabajar mucho para recuperar el prestigio» y anunció: «Hablaré con Messi porque lo quiero en mi equipo»

20 ago 2020 . Actualizado a las 09:01 h.

Ronald Koeman, 57 años, fue presentado este miércoles como nuevo entrenador del FC Barcelona tras firmar por dos temporadas, hasta junio de 2022. Vuelve al club en el que triunfó como jugador entre 1989 y 1995, una etapa en la que jugó 264 partidos y, pese a ser central, logró 88 goles, uno de ellos el que dio a la entidad la primera Copa de Europa de su historia, concretamente al 'Dream Team' del añorado Johan Cruyff. Desde que se fue estaba llamado a volver algún día, pero el regreso se ha ido retrasando hasta que ha llegado un momento propiciado por la crisis deportiva e institucional desencadenada por el humillante 2-8 ante el Bayern. Su carácter le avala más que el fútbol que han practicado sus equipos. Pero es lo que necesita el vestuario azulgrana; autoridad. Y tantas ganas tenía Koeman de volver que forzó su salida de la esperanzadora selección neerlandesa que dirigía, sabiendo incluso que un precandidato que parte como favorito a las elecciones de marzo de 2021, Víctor Font, ya ha dicho que traería a Xavi Hernández si gana aunque Koeman conquiste el triplete. Es un todo por el Barça.

«Todo el mundo sabe que el Barça está hecho para mí. Es mi casa. Estoy orgulloso de estar aquí, muy feliz», comenzó Koeman, pasando rápido de los sentimientos a la exigencia: «Vamos a trabajar para tener un equipo fuerte. Hay que hacer cambios, la imagen del otro día no es la que queremos. Hay que trabajar mucho para recuperar el prestigio. El Barça sigue siendo el club más grande del mundo. Esto es un sueño hecho realidad. Ahora a trabajar para que el Barça esté donde le corresponde, hay calidad suficiente. Es un reto, no es fácil, el Barça siempre exige el máximo y así debe ser. Hay calidad suficiente para exigir el máximo de resultados y de títulos».

Koeman es el quinto neerlandés que se sentará en el banquillo azulgrana tras Rinus Michels, Johan Cruyff, Louis van Gaal y Frank Rijkaard. Todos dejaron huella y ganaron títulos. Para no ser menos que sus compatriotas, garantizó, respecto a la reestructuración de la plantilla que «si hay que tomar decisiones, se tomarán». «No me gusta hablar de nombres, tenemos que buscar lo mejor para el club y hacer la mejor plantilla. Hay jugadores de cierta edad que podéis tener dudas sobre el rendimiento, pero un jugador con 31, 32 ó 33 años no está acabado. Depende del hambre y las ganas de darlo todo por el club. Los hay de 20 sin hambre o sin trabajo... Debemos buscar el mejor equipo para ganar partidos. Sólo quiero trabajar con gente que quiera estar aquí, si no están contentos aquí que lo digan. Quiero gente que lo vaya a dar todo por el Barça».

Y muy pronto salió el nombre de Leo Messi, con quien Koeman se va a reunir en breve, dando a entender que hasta que no que hable con él no sabrá si realmente se quiere ir o no: «No sé si tengo que convencer a Messi. Es el mejor del mundo y al mejor del mundo lo quieres en tu equipo, no en el contrario. Por mi parte, me encanta trabajar con Messi, te gana partidos con su rendimiento. Estaré contentísimo si quiere quedarse. Tiene contrato, pero hay que hablar con él, por supuesto. Vamos a hablar con varios jugadores, en el caso de Messi ojalá siga más años aquí. ¿Qué le diré? No voy a desvelar cosas privadas de lo que voy a hablar con los jugadores. Las decisiones las tomo yo. Messi tiene contrato y es tan importante que lo quiero en mi equipo».

Sí marcó diferencias entre el trato a Messi y el que puedan recibir otros jugadores. Lo dijo al ser preguntado por el posible adiós de Luis Suárez: «No me gusta hablar de nombres. He contestado por Messi porque es diferente. A los demás, si hay decisiones positivas o negativas, lo primero es hablar con ellos, aquí no voy a hablar de ellos, por respeto a los jugadores».

Refuerzos y estilo Respecto a posibles refuerzos, manifestó que «no hablo de jugadores que no están aquí, lo primero es mirar los jugadores que tengo aquí. ¿Van de Beek? Es muy bueno, lo sé, pero hay mucho más». En ese sentido, no cerró la puerta a quedarse con Coutinho, cedido al Bayern: «Es jugador del Barça y si hay que tomar decisiones, las tomaremos. Tengo tiempo de conocer mejor a los jóvenes que hay. Es momento de dar posibilidades a los jóvenes, los holandeses no tenemos ni una duda de poner a los jóvenes cuando lo merecen. No sólo jóvenes, hay que tener equilibrio, el equipo lo que tiene que cambiar es poner más intensidad».

Koeman, sobre las dudas generadas por el fútbol practicado por sus ex equipos (Vitesse, Ajax, Benfica, PSV, Valencia, AZ, Feyenoord, Southampton, Everton y Holanda), menos ofensivos de lo que se pide en el Camp Nou, replicó: «Soy holandés, nos gusta tener el balón, dominar el balón, intentar jugar bien y ganar el partido. Llevo años entrenando, he aprendido de muchos entrenadores, creo que estoy capacitado para entrenar al Barça al máximo nivel. Siempre ha habido una gran relación entre el Barça y Holanda. A los holandeses les encanta trabajar en el Barça, el fútbol es para disfrutar, es lo primero que voy a decir a los jugadores, sin disfrutar no sacas el máximo rendimiento. Hay que disfrutar y trabajar».

Y no sufre por la posible eventualidad de su cargo si se produce un cambio de presidente: «Lo primero es poner la energía en cosas que tienes en tus manos, lo único que puedo hacer es conseguir buenos resultados. Hay elecciones, lo sé, pero no puedo hacer nada. Vendrá un presidente nuevo, pero yo tengo que hacer mi trabajo y ganar los partidos, y si gano el próximo presidente puede tener más dudas y ojalá siga conmigo como entrenador».