Nadal arrolla a Carreño en su regreso a la competición

Enric Gardiner COLPISA

DEPORTES

CLIVE BRUNSKILL | REUTERS

El balear regresó a la competición más de medio año después tras el parón por el coronavirus y lo hizo arrollando a Carreño en su debut en Roma

17 sep 2020 . Actualizado a las 08:47 h.

465 días después de su último encuentro en tierra batida y por primera vez desde el pasado 29 de febrero, Rafa Nadal volvió este miércoles a una pista de tenis. El balear, que no competía oficialmente desde que ganara el torneo de Acapulco hace más de seis meses, reapareció en Roma, en la segunda ronda del torneo, y lo hizo con triunfo ante Pablo Carreño (6-1 y 6-1), llegado directamente de las semifinales del Abierto de Estados Unidos.

Tras renunciar a la gira americana y con ello, negar la defensa del título en Nueva York, Nadal planteó su vuelta a la competición en su superficie fetiche y en un torneo como el romano que ha ganado en nueve ocasiones. Pese a llevar sin competir en arcilla desde que ganara Roland Garros en 2019, Nadal apenas notó el parón competitivo después de llevar semanas entrenando sobre esta superficie en Manacor.

Enfrente tenía a un rival mucho más rodado y con minutos de tenis en las piernas, puesto que la semana pasada Carreño era eliminado en las semifinales del US Open en cinco sets por el, a la postre, subcampeón Alexander Zverev. Pero Nadal apenas sufrió en los compases iniciales el desgaste de haber estado fuera tantos meses. Le costó arrancar y en el primer juego, pese a que se puso 40-0, se dejó remontar hasta conceder la primera bola de rotura al asturiano. Una pequeña falta de precisión y de consistencia que fue arreglando según pasaron los minutos.

Carreño salvó el juego posterior para el 1-1, pero se entumeció ante el empuje de un Nadal que fue ganando en temperatura con la derecha y regularidad con el revés y el servicio. En el cuarto juego rompió el saque del gijonés y ya no soltó el mando de un primer set que se marchó a su zurrón con unas estadísticas que reflejaban nueve golpes ganadores a su favor y siete errores no forzados.

El 6-1 era un resultado que no sorprendía a nadie dada la medida que le tiene tomada Nadal a Carreño, con un total de cinco enfrentamientos y solo un set rascado por el pupilo de Samuel López. Pero Nadal, pese al revolcón final de ese primer set, en el que se apuntó los diez últimos puntos, tenía aspectos en los que mejorar y es que el óxido de seis meses fuera no se quita en los apenas 36 minutos durante los que se extendió la primera manga.

Por eso, el manacorense atacó a Carreño desde el principio, le quebró el servicio a las primeras de cambio y mostró un nivel competitivo excelso, de menos a más desde aquel dudoso primer juego al servicio, cometiendo solo cuatro errores no forzados en el segundo parcial. A sus 34 años, Nadal parece no haber notado el peso de un parón al que quizás se acostumbró en otras etapas de su carrera, aunque nunca por una pandemia, sí por lesiones. En apenas una hora y 13 minutos, Nadal terminó con las esperanzas de un Carreño que nunca se vio con oportunidades ante el rey de la tierra y que tendrá que esperar a Roland Garros para seguir con la racha mostrada en el cemento estadounidense.

En la tercera ronda, Nadal se enfrentará al ganador del duelo entre el canadiense Milos Raonic, finalista en Cincinnati, y el serbio Dusan Lajovic, que el año pasado fue finalista en el Masters 1.000 de Montecarlo.

Nadal descansará este jueves, ya que el torneo ha variado su programación respecto a otros años, y esta vez los jugadores contarán con un día de recuperación, jugándose la final el lunes, en lugar del domingo como es habitual. En la jornada de este miércoles también volvió a la competición Novak Djokovic, tras su descalificación en Nueva York, y venció en dos cómodos sets (6-3 y 6-2) al local Salvatore Caruso.