La Federación Española comunica que Craviotto, Walz, Arévalo y Germade formarán el K4 500 que competirá en los Juegos de Tokio

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo REDACCIÓN

DEPORTES

JONAS PRAVIA

La decisión del seleccionador nacional, Miguel García, pone el punto final al polémico proceso de cribado del barco de equipo, llamado a pelear por el oro olímpico

24 mar 2021 . Actualizado a las 11:40 h.

Nueve días después de la conclusión del proceso selectivo, cerrado con una nueva demostración de poderío del betanceiro Carlos Arévalo en las últimas series sobre el K1 200, el seleccionador nacional de K4 500, el asturiano Miguel García, terminó este martes de deshojar la margarita. El catalán Saúl Craviotto, el balear Marcus Cooper Walz y los gallegos Arévalo y Rodrigo Germade serán los depositarios de la misión de llevar al barco de equipo hispano a la gloria olímpica en los Juegos de Tokio. Una combinación de cuya elección pocos dudaban al término de la primera serie de tres tiradas contrarreloj con las que arrancaba el proceso de cribado el primer fin de semana del mes, con el zamorano Carlos Garrote y el viveirense Cristian Toro aspirando también a un asiento en la embarcación. Su decisión de abandonar la concentración de Trasona tres días después de que el a la postre cuarteto ganador marcase el mejor crono con casi 4 segundos de mejora respecto a las combinaciones en las que habían paleado Garrote y Toro, presentando sendas bajas médicas y tras haber acusado sus entornos a Craviotto de amaño, no impidió que el selectivo continuase adelante.

Con una última contrarreloj de K4 y dos series de K1 200 entre los cuatro palistas disponibles, Miguel García completó el acopio de información que fue recogiendo desde el inicio de la concentración del sexteto el pasado octubre. Y tras analizarla a fondo, informaron este martes desde la Real Federación Española de Piragüismo, «considera que la tripulación formada por Craviotto, Cooper, Arévalo y Germade ha demostrado ofrecer mayores garantías de éxito de cara a los Juegos, figurando en ella los mejores representantes de K1 200», por lo que será la que «competirá en Tokio».

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La Federación Española de Piragüismo comunica que Craviotto, Walz, Arévalo y Germade integran el K4 que competirá en JJOO de Tokiohttps://t.co/xWZgchYAtP

— PiragüismoEspaña (@RFEPiraguismo) March 23, 2021

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En el comunicado federativo, el seleccionador argumenta su decisión en base a que el cuarteto elegido «obtuvo un resultado claramente superior a los de las otras combinaciones del selectivo, manteniendo unos valores de número y frecuencia de paladas muy similares, lo que indica una mejor eficiencia derivada, muy posiblemente, de una mejor compenetración y sincronización, elementos decisivos en el rendimiento de una embarcación de equipo».

Con esta última frase, García parece querer responder a aquellos que minusvaloraron el acoplamiento como uno de los factores diferenciales de la eficiencia de un K4 en medio de la gravísima crisis desatada por los entornos de Garrote y Toro, hasta el punto de la intervención de un juez de Avilés para bloquear la difusión de una conversación privada entre Craviotto y García que habría grabado sin permiso Garrote.

El Fluvial acata la decisión

El Fluvial de Lugo, club de Toro y uno de los que habían sostenido la falta de limpieza del selectivo, emitió este martes un comunicado en el que «acata y respeta» la decisión de la RFEP y dice que su deportista «seguirá trabajando al máximo nivel para aportar lo que el equipo nacional pueda necesitar de él en caso de alguna eventualidad».

Test en la Copa del Mundo y orden a Toro y Garrote para reintegrarse al equipo

Desde la RFEP recordaron que los criterios de selección del K4 500 y el K1 200 determinaban que si una combinación del barco de equipo le sacaba al menos 6 décimas de segundo a las restantes y en ella figurase el ganador del cribado del K1 200, ambos, tripulación y velocista, se agenciarían las plazas en los Juegos. Condiciones que sitúan a Carlos Arévalo en la pelea por dos medallas olímpicas en agosto. En el K4, junto a los compañeros con los que en el 2019 conquistaba la plata en el último Mundial y el billete a Tokio.

Pocos dudan de que den la talla en la Copa del Mundo de mayo, cumplimentando así el último requisito para sellar sus nombres en la lista de embarque de la delegación olímpica española.

¿Y qué pasa con Garrote y Toro? La RFEP informa que «continuarán su preparación dentro de los objetivos del proyecto del K4 para los Juegos, teniendo en cuenta la pandemia y cualquier otra eventualidad que hiciere necesario un refuerzo inmediato del proyecto».

Dar una alegría tras pasar «un mal año» 

En declaraciones que difundía a primera hora de la noche del martes la RFEP, Craviotto manifestaba: «Estamos en la recta final. Quedan cuatro meses para los Juegos y ahora toca lo que siempre hacemos en los ciclos olímpicos: meternos en nuestra cúpula de cristal, centrarnos en el objetivo principal, que es ir a los Juegos de Tokio, e intentar volver con lo máximo que podamos, a poder ser con una medalla y darle una alegría al piragüismo y a España, que hemos pasado un mal año».

Por su parte, Rodrigo Germade señala que acudir a los Juegos Olímpicos «es algo por lo que» llevan «mucho tiempo luchando. Estamos con muchas ganas e ilusión. Estamos con ganas de comernos Tokio. Vamos con un objetivo muy ambicioso. Intentaremos estar a la altura y conseguirlo», sentencia el de Cangas.