Se deshizo por la vía rápida y con un fútbol pragmático de una Ucrania muy inocente y se cita con Dinamarca en las semifinales de Londres
04 jul 2021 . Actualizado a las 10:10 h.En Roma, la última escala antes de Wembley, retumbaba el Ucrania aún no ha muerto, himno nacional de la república. Unos acordes compuestos en el siglo XIX —la letra fue cambiada por el parlamento en el 2003— ideales para amedrentar rivales antes de unos cuartos de final.
Pero no asustó la épica musical a Inglaterra, que a los cinco minutos ya se vio por delante en la eliminatoria. El plan ucraniano durante esta Eurocopa ha fiado todo a su defensa de cinco y mantener sus líneas bien juntas. Y así les había ido bien en octavos. Lamentablemente para los ucranianos, Inglaterra no es Suecia. En el agradable camino de la selección de Southgate hasta «su» final, solo se interpone ya Dinamarca.
A los three lions les había valido esperar a los alemanes en Londres. Frente a Ucrania, les tocaba tomar la iniciativa ante un bloque solidario y líquido en defensa, con una línea de cinco que se acompasa de manera hipnótica.
Pero en el minuto cuatro, un cambio de ritmo de Sterling descolocó lo justo a los zagueros. El del City vio una grieta en el repliegue de Krivstov y filtró un pase teledirigido a la espalda del eslavo y a los pies de Harry Kane. Gol y partido de cara. Un panorama perfecto para una selección que no encaja un gol desde el mes de marzo.
El gol no cambió el plan de Shevchenko. Mantuvo su defensa de cinco y apeló a la paciencia con las contras. Pero la inferioridad de su equipo era descarada. Inglaterra, a chispazos, casi pone el segundo a la media hora. Otra vez Sterling rompió la monotonía metiendo una marcha más y ocasionó un nuevo desequilibrio en la defensa. Su pase al área acabó en un rechace que recogió Declan Rice. El del West Ham le pegó con toda su alma y Buschcnan se la quitó de encima como malamente pudo.
Inglaterra sabe especular. Pero eso tiene sus riesgos. Bajó una marcha y Ucrania se creció en los últimos minutos del primer tiempo. Shevchenko cambió a una defensa de cuatro hombres e hizo sufrir a Inglaterra, a la que le vino muy bien el descanso.
El porqué de Shevchenko
Quedó muy claro en la reanudación el porqué de la defensa de cinco ucraniana. Si en los cuatro primeros minutos del primer tiempo Inglaterra hizo un gol; en los cuatro primeros de la segunda, anotó dos. Maguire y Kane, ambos de cabeza, sentenciaron el partido. Ucrania aún no ha muerto, pero estaba claro que le quedaban uno o dos coletazos. O ni eso. Por eso los himnos suenan antes y no después de los partidos.
Henderson celebró el cuarto gol —también de cabeza— como si significase mucho para él. Lo cierto es que, para el devenir del partido, que anotase fue tan trascendente como si no lo hubiese hecho.
Ucrania tumbó el rey e Inglaterra, piadosa en la capitulación, dejó pasar el tiempo y dio descanso a sus futbolistas que se van llenando de razones para creer que esta vez sí.
Ficha técnica:
0 - Ucrania: Bushchan; Zabarnyi, Kryvtsov (Tsygankov, m.36), Matviyenko; Karavaev, Sydorchuk (Makarenko, m.64), Shaparenko, Zinchenko, Mykolenko; Yarmolenko, Yaremchuk.
4 - Inglaterra: Pickford; Walker, Stones, Maguire, Shaw (Trippier, m.65); Phillips (Bellingham, m.65), Rice (Henderson, m.57); Sancho, Mount, Sterling (Rashford, m.65); Kane (Calvert-Lewin, m.73).
Goles: 0-1, m.4: Kane; 0-2, m.47: Maguire; 0-3, m.49: Kane; 0-4, m.63: Henderson.
Árbitro: Felix Brych (ALE). No hubo amonestaciones.
Incidencias: Partido correspondiente a los cuartos de final de la Eurocopa disputado en el estadio Olímpico de Roma ante cerca de 11.880 espectadores.