Ya no depende de sí misma para ser primera y la repesca es muy complicada
03 sep 2021 . Actualizado a las 09:01 h.La derrota de España en Suecia complica muchísimo las opciones de la selección de estar en el próximo Mundial de Catar. Tras cuatro partidos es segunda del grupo B con 7 puntos y su rival de ayer ya tiene 9, además de contar con un partido menos. Incluso Grecia, que tiene 2 puntos tras solo dos partidos, podría superarle en la clasificación en cuanto recupere los partidos pendientes.
La situación es dramática. Solo los campeones de grupo se clasifican de forma directa para disputar el Mundial y los diez subcampeones acceden a la complicadísima repesca, que dará las últimas tres plazas para la Copa del Mundo.
Las cuentas para que España sea campeona de grupo requieren casi de una carambola. Necesita ganar los cuatro partidos que le quedan (en casa ante Georgia este domingo y ante Suecia el 14 de noviembre; y fuera en Kosovo el próximo miércoles y en Grecia el 11 de noviembre). Y luego esperar a que Suecia pierda uno de sus otro cuatro encuentros, además del citado contra la selección de Luis Enrique (le queda por jugar fuera, en Grecia el próximo miércoles y en Georgia el 11 de noviembre; y en casa ante Kosovo el 9 de octubre y ante Grecia el 12 de octubre). Si en vez de una segunda derrota es un empate, habría que atender al golaveraje.
Incluso para ser segunda, España tampoco lo tiene muy claro. Grecia podría superarle en la clasificación cuando dispute los dos partidos que tiene pendientes y además hay un Grecia-España pendiente en el que quizás solo valga ganar.
¿Y si España es segunda? Se clasificaría para una complejísima repesca, que este año estrena formato. Los diez segundos clasificados y otras dos selecciones provenientes de la Liga de las Naciones integrarían tres grupos de cuatro equipos cada una. Se jugarían seis semifinales y tres finales, a partido único, y los tres ganadores de esa doble eliminatoria sacarían los últimos billetes para Catar.
A día de hoy, los segundos clasificados serían Serbia, Suiza, Ucrania, República Checa, Israel, Países Bajos, Alemania, Rusia y Hungría. Y otras como Italia, Croacia o Portugal, que ahora mismo son líderes, tampoco deben despistarse para no caer en el enredo.
El comodín de España
Si la selección española completase el fracaso en la fase de grupos y no estuviese ni entre las dos mejores del grupo B, todavía tendría una última opción de estar en el Mundial. Y sería ir a la repesca gracias a la Liga de las Naciones, que se jugará en octubre. Para ello, tendría ganar la competición. El 6 de octubre jugará en Milán la semifinal contra Italia y, si pasa, cuatro días después, en el mismo escenario, contra Bélgica o Francia.
Son las rocambolescas cuentas para una selección española que se ha complicado muchísimo su clasificación para el Mundial. Ya no depende de sí misma. Está en las manos de Suecia, en primer término, y de Grecia.