El ya propietario del Sporting manda un mensaje de tranquilidad a la afición durante la presentación de su nueva junta directiva
29 jun 2022 . Actualizado a las 09:19 h.El nuevo propietario del Sporting, Alejandro Irarragorri, aseguró este martes que «el objetivo es recuperar el sitio» que el equipo gijonés «se merece», pero advirtió de que en el nuevo consejo administración no quieren «ser populistas haciendo promesas más allá del trabajo diario». La presentación del nuevo consejo de administración del Sporting se produjo apenas diez horas después de que se firmase en Madrid la compra del 73 por ciento de las acciones del club que desde hace 28 años estaban en posesión primero de José Fernández y posteriormente de su hijo Javier.
El nuevo órgano directivo del club gijonés estará presidido por el propio Alejandro Irarragorri, propietario a su vez del Grupo Orlegi, que fue el que compró las acciones, y junto a él están David Guerra como director ejecutivo, Alfonso Villalva y Martin Hollander como consejeros y José María Segovia actuará como secretario pero sin el cargo de consejero. La parcela deportiva quedará bajo la responsabilidad de Gerardo García, con Abelardo Fernández como el entrenador del primer equipo, ya que su puesto fue oficialmente ratificado por David Guerra, que lo definió como «el primer gran fichaje para el club».
Irarragorri repitió varias veces la necesidad de implantar su metodología de trabajo en el Sporting «en todas las áreas y en todos los aspectos», y aseguró que «el club tiene un presente complejo pero seguro que un futuro fantástico». El nuevo presidente del Sporting no quiso desvelar el precio total de la operación de compra del club -«hablar de dinero no es muy prudente»- y consideró que «Javier Fernández vende porque los tiempos son complejos y el fútbol está evolucionando muy rápidamente».
«No queríamos comprar el primer club que se pusiera a tiro en el sitio que fuese, queríamos un club que tenga todo lo que tiene el Sporting, no teníamos prisa», aseguró Alejandro Irarragorri, quien afirmó que «no hace falta ser una gran ciudad para tener un gran club; así lo ha demostrado Villarreal». El nuevo propietario del Sporting reconoció que ya había realizado «una larga lista de llamadas en busca de posibles patrocinadores» y reiteró que «la clave del éxito estará en la suma de voluntades».
Irarragorri entiende «la importancia de un resultado pero el fracaso genera pilares, no hay una varita mágica, eso solo es fantasía», y definió a su grupo de trabajo «no como aficionados si no como apasionados y eso supone una enorme responsabilidad».
Sobre la recompra de la escuela de Mareo al Ayuntamiento que estaba ya negociando Javier Fernández Irarragorri indicó que «primero hay que centrarse en lo urgente y necesario» y sobre los planes anunciados para la ampliación de Mareo los nuevos propietarios consideran que «hay idean muy buenas pero hay que ponerlas sobre la mesa y ver cuales son reales».
Por su parte, David Guerra, el nuevo presidente ejecutivo del Sporting, habló más claro sobre el ascenso y aseguró que «es el objetivo, pero lo que no sabemos si será hoy o será mañana; lo que es seguro es que vamos a construir el proceso para ello y estamos convencidos de que se puede».
Guerra anunció la incorporación de Guillermo Sampedro como director financiero y la llegada a la parcela técnica, junto a Gerardo García, de David Fernández como director de captación u Odín Vite como responsable del área de ciencias aplicadas al deporte.
Irarragorri mandó un mensaje de tranquilidad a la afición asegurando que «se está trabajando en fichajes», aunque negó que se vaya a producir «una mejicanización de la plantilla», a la vez que advirtió de que «no habrá un director deportivo que tomará las decisiones, se trabajará de forma estratégica y desde lo colectivo».
La presentación de los nuevos propietarios del Sporting se convirtió a pesar de la hora en un acto social ya que estuvieron presentes la consejera de Cultura Berta Piñán, la alcaldesa de Gijón Ana González, el presidente de la Cámara de Comercio Félix Baragaño, el director general de la Federación Asturiana de Empresarios, Alberto González, o el presidente de la Federación Asturiana de Fútbol José Ramón Cuetos Lobos, así como una amplia representación de la Asociación de Veteranos y los presidentes de las dos asociaciones de aficionados más importantes, informa Efe.