Un gol de Hwang en el descuento permite al conjunto asiático imponerse a la segunda unidad de Portugal y colarse en octavos
02 dic 2022 . Actualizado a las 19:31 h.El disparo de Vitinha desde la frontal llevaba la fuerza suficiente para que Seung-Gyu no pudiera blocar ni orientar el rechace. Por eso el balón quedó muerto delante del portero, quien, vencido sobre el césped, vio lanzarse en plancha a Cristiano Ronaldo para rematar a placer. Inexplicablemente, el delantero portugués mantuvo a Corea del Sur en el partido cabeceando lejos de la red.
Los dos asuntos en juego, concentrados, a la altura del minuto 40, en una sola acción. La permanencia del conjunto asiático en Catar y el doblete anotador del capitán luso en el Mundial. Solo el segundo acabó mal. Los chavales de Paulo Bento, festejando enloquecidos el gol de Hee Chang Hwang en el 90; Cristiano, enfadado en la ducha, incapaz de alcanzar todavía la marca de Eusebio al servicio de su país.
De nada sirvió la entrega a la misión de la segunda unidad de Portugal, que transmitió buenas sensaciones pese a jugar sin el acicate de la necesidad. El 7 solo aportó al encuentro el cabezazo al vacío, un montón de gestos que delataban ansiedad, un mano a mano dilapidado y la involuntaria asistencia en el primer gol rival. La selección coreana empató en un córner ejecutado por Kang-in Lee. La pelota rebotó en el ex del United y quedó al alcance de uno de los Kim (Young-Gwon). El central batió a Diogo Costa, devolviendo a su equipo la esperanza que durante un buen rato le había arrebatado Dalot.
El lateral firmó una actuación superlativa, penetrando constantemente por el flanco derecho. Pepe detectó su primer avance, a los 5 minutos, y envió el cuero para que el carrilero lo controlara, se deshiciera de su marca y centrara raso atrás. Allí apareció Horta, autor del 1-0 que otorgaba al grupo de Fernando Santos el tres de tres.
El técnico, que había entregado el choque a sus menos habituales, colocó al volante a Vitinha, capaz de mitigar la ausencia de Bernardo Silva y Bruno Fernandes a través de acciones de gran calibre. Por mucho tiempo, Corea se quedó sin respuesta a las incursiones de su oponente por los flancos. En el izquierdo, Cancelo también fue capaz de romper en un par de ocasiones las líneas demasiado endebles del único equipo obligado a ganar.
Sin embargo, al filo de la media hora, el saque de esquina prolongado involuntariamente por Cristiano devolvió el aliento a los asiáticos, tocados por la lejana ventaja de Uruguay. Un resultado ajeno que digirieron con sorprendente calma, sin tocar a rebato ni perder la fe.
Apenas se contabilizaron ocasiones tras el descanso. La más clara, en un error luso que dejó a Woo-Young en posición de disparo. El chut fue centrado y Diogo Costa lo manoteó, llevando el suspense al descuento. En cuanto se alcanzó, un córner a favor de Portugal se transformó en la contra del 2-1, perfectamente dirigida por Heung-Min Son y culminada por Hwang. A la victoria le sucedió enseguida la uruguaya; insuficiente. A Brasil le toca Corea, que tuvo paciencia hasta el final.
Ficha técnica:
Corea del Sur: Seunggyu, Moonhwan, Younggwon (Junho Son, min. 81), Kyungwonm, Jinsu, Wooyoung, Inbeom, Son, Jaesung (Hwang, min. 65), Kang-in Lee y Guesung (Cho Yumin, min. 93).
Portugal: Diogo Costa, Dalot, Pepe, António Silva, Cancelo, Matheus Nunes (Palinha, min. 65), Rúben Neves (Leao, min. 65), Vitinha (Bernardo Silva, min. 81), Joao Mário (W. Carvalho, min. 81), Cristiano Ronaldo (André Silva, min. 65) y Ricardo Horta.
Goles: 0-1: min. 4, Ricardo Horta. 1-1: min. 26, Younggwon. 2-1: min. 91, Hwang.
Árbitro: Facundo Tello (Argentina). Amonestó a a Kang-in Lee y Hwang.