Un Mundial por romperse tu hermano

DEPORTES

La gravísima lesión de Lucas Hernández en el primer partido de la fase de grupos contra Australia abrió la puerta de la titularidad a su hermano Theo

14 dic 2022 . Actualizado a las 09:06 h.

Al Mundial de Catar acudieron tres parejas de hermanos. Los Williams, con Nico defendiendo a España e Iñaki a Ghana; los Milinkovic-Savic, con Vanja, portero nacido en Ourense, y Sergej, centrocampista, que compitieron por Serbia, y los Hernández. A Lucas (Marsella, 1996) y Theo (Marsella, 1997) les va a costar olvidarlo. Al primero, que partía claramente como titular, porque apenas se sostuvo 9 minutos en el Mundial. Al segundo, porque fue precisamente esa grave lesión de su hermano la que le permitió jugar. Ambos competían por el lateral izquierdo. Lucas lo ocupa en el Bayern de Múnich. Theo, en el Milan.

La estampa fue paradójica. Australia le marcó a Francia en el aperitivo del primer partido. Leckie encaró a Lucas, lo fintó, y sirvió el gol a Goodwin. El francés se desplomó. Se retorció de dolor y las asistencias solo pudieron llevárselo a hombros. Mientras Lucas se marchaba llorando por un fondo del estadio Al-Janoub, en el otro margen, Theo entró para relevarlo. Fue la segunda vez, en la historia de los Mundiales, que un hermano sustituyó a otro. Curiosamente, la otra la protagonizó el que será hoy su rival, el marroquí Sofyan Amrabat. Ante Irán, en Rusia 2018, entró por Nordin.

AFP7 vía Europa Press

Su padre, desaparecido 18 años

Lucas y Theo nacieron con 20 meses de diferencia. Su padre, Jean-François, que fue jugador del Compostela, Rayo Vallecano y Atlético, fue hallado por el diario L’Equipe semanas antes de comenzar el Mundial. «Nunca entendí y nunca entenderé cómo pudo irse, de la noche a la mañana, dejándonos a mi madre, a mi hermano pequeño y a mí. Biológicamente es mi padre, pero nunca lo veré así», afirmó en una entrevista Lucas, en el 2019.

Ahogado por las deudas, a Jean Françoise se le había perdido la pista en el 2004 en Tailandia. Lucas y Theo llegaron a dudar si había muerto. La investigación del diario francés lo halló residiendo en Burdeos. Los hermanos contaron que esa situación familiar los unió más.

La misma madrugada que cayó lesionado ante Australia, en una clínica de Doha, el diagnóstico de Lucas fue un mazazo. Se había roto el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha.

«Quiero llevar el trofeo para él»

«Hablo con mi hermano todos los días por teléfono desde que se fue de Catar. No está siendo fácil porque, además, su lesión es muy larga. Quiero jugar todos los partidos aquí porque quiero llevar el trofeo para él», contó, tras la liguilla, el pequeño de los Hernández.

AFP7 vía Europa Press

Theo, más ofensivo pero con menos hechuras defensivas que Lucas, se quedó como único lateral zurdo de Francia. En Rusia 2018, Lucas besó la Copa del Mundo. Theo no estaba. Ahora es él quien puede tener la oportunidad de hacerlo. Jugando, por la desgracia de su hermano.