La mujer de Dani Alves, Joana Sanz, reaccionó en redes sociales a una publicación sobre ella que no le gustó
10 mar 2023 . Actualizado a las 08:24 h.Desde que Dani Alves, exfutbolista de Barcelona y Sevilla, entró en prisión el pasado 20 de enero, acusado de violar presuntamente a una joven en una discoteca de Barcelona, su mujer, Joana Sanz se ha refugiado en su trabajo. Volcada en su profesión, la modelo ha viajado hasta Dubai para amadrinar una conocida marca de estética. A su regreso, la canaria explotó nuevamente ante la prensa después de que desde una conocida revista le acusasen de haber tenido un gesto feo con una periodista.
«Sin querer contestar y sin querer oír más preguntas, Joana Sanz empieza a rebuscar en su bolso para coger sus cascos inalámbricos. Esto se entiende como un gesto feo hacia los medios, ya que a la vez que se los pone su rostro hace una llamativa muesca», fue el texto de Lecturas que hizo estallar a la mujer de Dani Alves.
«¿Gesto feo el mío? Estaba cansada, sin dormir en siete horas de vuelo, sin comer desde la cena... Se lo dije a la periodista que venía de siete horas de vuelo y siguió con preguntas que ya saben que no voy a contestar», explicó Joana Sanz en redes sociales.
«Es incómodo que te esperen a tu llegada o que te persigan para hacerte preguntas de algo que intentas superar. Pues me pongo mi música, porque no voy a permitir que me hagan daño en un intento de conseguir titulares», añadió molesta.
Joana Sanz se sinceró sobre el delicado momento que atraviesa desde la detención de Dani Alves
Durante su estancia en Dubai, por primera vez, Joana Sanz se sinceró sobre el delicado momento que está atravesando desde la detención de Dani Alves. Intentando sonreír pero con un poso indisimulable de tristeza, la canaria reconoció que está atravesando una «situación complicada» y confesó que ahora lo que necesita son «alegrías profesionales».
«Todo lo que tenga que ver con mi trabajo me hace feliz y me siento afortunada por poder seguir adelante», admitió Joana Sanz en su reaparición pública. Unas declaraciones que ha querido puntualizar este jueves a su regreso a Madrid. Agobiada, Joana Sanz dejó claro que no había dado «ningún tipo de entrevista». «Ha sido solamente una conversación de trabajo, nada de lo que estáis diciendo es cierto y no voy a contestar a nada, de verdad», afirmó evidenciando que quiere seguir al margen del complicado futuro al que se enfrenta Dani Alves, que está a punto de cumplir dos meses en prisión y cuyo futuro judicial se presenta de lo más negro.
Cabizbaja, la modelo asintió cuando fue preguntada si su aliado en este momento tan delicado era el trabajo y, cerrada en banda, se negó a confirmar si sigue apoyando a su marido o si, por el contrario, ha iniciado una nueva vida en la que el futbolista no tiene cabida. Muy discreta, Joana Sanz tampoco quiso pronunciarse sobre los paralelismos entre ella e Hiba Abouk, cuyo marido, el también futbolista Achraf Hakimi, ha sido inculpado por la Fiscalía francesa por la presunta violación de una joven en su domicilio de París.
Joana Sanz había estallado anteriormente contra la prensa
El primer desfile de Joana Sanz desde que Dani Alves ingresara en prisión preventiva fue el pasado mes de febrero en la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid. Allí la modelo recibió el cariño de los asistentes, que le brindaron una ovación cuando salió a desfilar, pero no quedó conforme con el trato de la prensa. «Estoy volviendo al trabajo y enfocándome. Aquí estoy para hablar de mi trabajo y nada más. No voy a hablar de mi vida personal».
Ya en casa, recordando las preguntas de los periodistas, Joana Sanz escribió en redes sociales: «A la prensa que me recibió, sois unos seres humanos horribles. Espero que podáis dormir por la noche con ese cargo de conciencia».
