Una semana de trabajo de cuatro días, la lucha laboral del siglo XXI

La Voz LA VOZ / AGENCIAS

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Los sindicatos británicos creen que los avances tecnológicos lo permiten y que puede ser un «objetivo realista para la mayoría de la gente para fines de este siglo»

11 sep 2018 . Actualizado a las 12:20 h.

La confederación de sindicatos británicos TUC propuso ayer medidas para mejorar las condiciones de los trabajadores, entre ellas introducir una semana laboral de solo cuatro días, con tres festivos, por el mismo sueldo, y como medida para mejorar la productividad e incentivar el consumo. 

Así lo anunció ayer su secretaría general, Frances O'Grady. En su opinión los avances tecnológicos lo permiten y en un «objetivo realista para la mayoría de la gente para fines de este siglo».  Los trabajadores también tendrían así beneficios de la evolución tecnológica y de la automatización de muchas de las tareas laborales.

«En el siglo XIX, los sindicatos hicieron campaña por un jornada laboral de ocho horas. En el XX, ganamos el derecho a un fin de semana de dos días y a festivos pagados. Entonces, para el siglo XXI, levantemos nuestra ambición nuevamente», explicó O'Grady en su discurso en la reunión anual de la organización.

La evolución de la tecnología y de las comunicaciones deberían propiciar, en su opinión, que en este siglo los trabajadores ganen una «semana laboral de cuatro días, con un salario digno para todos». 

«Es hora de compartir la riqueza que generan las nuevas tecnologías y no permitir que aquellos en la cima se la queden para ellos solos», destacó la secretaria general de los sindicatos británicos.

La organización de sindicatos británicos recordó informes de economistas de la posguerra que aseguraron que los empleados trabajarían 15 horas a la semana. «En cambio las nuevas tecnologías amenazan con intensificar la vida laboral», dice un informe de la TUC. La economía bajo demanda ha significado un regreso a los «días de trabajo a destajo, creando una cultura en la que los trabajadores deben estar constantemente disponible para trabajar».

Encuestas de la confederación de los sindicatos británicos aseguran que las principales preocupaciones de los trabajadores, después del sueldo. son el estrés y las largas horas de trabajo. 

 En este sentido, Frances O'Grady acusó directamente a Amazon y a su dueño, Jeff Bezos. «Está acumulando miles de millones mientras sus trabajadores colapsan agotados en el trabajo», denunció.