¿Es el 2017 el año del fin de Belén Esteban?

La Voz LA VOZ / CHANCE

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Su archienemigo y exrepresentante, Toño Sanchís, acaba de fichar por El programa de Ana Rosa y será uno de los concursantes estrella de Gran Hermano VIP

23 dic 2016 . Actualizado a las 17:37 h.

¿Será el 2017 el año del fin de Belén Esteban? La princesa de San Blas lleva casi 20 años vendiendo su vida en televisión, pero el próximo año puede ser el de su final. En este 2016 Belén Esteban ha volado sola y sin representante, después de descubrir que su representante, Toño Sanchís, le había estafado varios millones de euros.

Ahora, tras un año casi en silencio, con intento de suicidio incluído, Toño Sanchís vuelve a la carga y con muchos ases en la manga según parece. Hace unos días daba su primera entrevista en televisión tras muchos meses en los que nadie le escuchó su versión de los hechos, ahora ha sido fichado como flamante colaborador de El programa Ana Rosa y el próximo 8 de enero es uno de los favoritos para entrar en la casa de Gran Hermano VIP. 

¿Puede la vuelta de Toño Sanchís a la televisión hundir a Belén Esteban? No es probable y para reforzar esta idea, uno de sus principales valedores, Jorge Javier Vázquez, ha salido en su defensa. «Por mucho que algunos se empeñen, no solo no está acabada, sino que está en proceso de reconversión. Le queda cuerda para rato». El presentador catalán, que tampoco ha pasado su mejor año a nivel profesional tras el batacazo y las críticas que le han llovido tras coger las riendas de Gran Hermano, se mostró disgustado con las declaraciones de Toño Sanchís cuando acudió a El programa de Ana Rosa: «Tiene muchísimo delito» y «su discurso es vacuo y exento de firmeza».

Belén Esteban guarda silencio

Belén Esteban ha optado por el silencio tras la vuelta a la televisión de Toño Sanchís, pero es de suponer que estará disgustada de que su anterior jefa y que durante años fue uno de sus apoyos haya fichado a su peor enemigo. 

La colaboradora no quiso hacer ninguna declaración acerca de la última entrevista concedida por Toño Sanchís en El Programa de Ana Rosa, donde volvía a remover el pasado asegurando que las conversaciones que Belén aseguró tener con Jesulín de Ubrique eran mentira y las contaba para poner celosa a la actual mujer del diestro, María José Campanario. Además, el representante ha insistido en que él también tiene pruebas, unas cartas con las que está seguro de poder ganar.

Los duros ataques por parte de Toño y la noticia de que se va a convertir en el nuevo colaborador del programa de AR le han sentado como un auténtico jarro de agua fría. Mientras tanto, Belén se refugia en su pareja, Miguel, para sobrellevar su guerra mediática con su ex representante.

Fran Álvarez: «A mí que me dejen en paz»

Toño Sanchís ha vuelto a abrir la caja de pandora. Unas nuevas declaraciones en El Programa de Ana Rosa han vuelto a levantar ampollas. Belén Esteban vuelve a ser salpicada por la polémica y rebote le ha caído a Fran Álvarez. El que fue representante de la princesa del pueblo dejaba caer que en su día Belén se interpuso para que Fran no acudiese a los programas de televisión y fuese concursante de realities ya que en ese tiempo, el marido de la Esteban era un personaje muy jugoso. 

Sin embargo Fran ha rehecho su vida y no quiere volver a estar en el foco mediático ya que confiesa que ha pasado página. Tanto que ha confesado estar dispuesto a firmar la nulidad matrimonial si Belén Esteban lo necesitase para poder casarse con su Miguel: «Yo tengo mi vida hecha, Belén tiene la suya, y cada uno con su vida puede hacer lo que quiera. ¡Qué le vaya bien! Igual que a mi me va bien, gracias a Dios, y ya está. No deseo mal a nadie, ni a Toño ni a ella. Pues que es un problema que tiene él con Belén, que yo creo que ahí no pinto nada, el problema lo tienen ellos dos».

Fran no quiere ser el tercero en esta discordia e intenta alejarse de los medios en una polémica que afirma es un problema de Toño Sanchís y de Belén Esteban, sin embargo parece que Toño se empeña en meterle en medio: «No he visto nunca nada. Mira, ya te he dicho que eso es un problema que tienen ellos dos, yo ahí no quiero opinar ni opino, porque no soy nadie para opinar».