Los detalles de la ruptura de coxis de Pilar Rubio: el dedito y el culito

La Voz

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La presentadora relató en «El Hormiguero» como hace ocho años se puso unos patines, se ató a una furgoneta y se cayó de culo, lo dolorosa que fue la fractura y los detalles de su recuperación

20 abr 2017 . Actualizado a las 20:36 h.

Pilar Rubio vivió este miércoles en El Hormiguero hasta dos embarazosos momentos. El primero, cuando Pablo Motos, aprovechando la visita al plató de Andy y Lucas, le recordó su primer tonteo público con el que hoy es su pareja, el futbolista Sergio Ramos. La presentadora, poco amiga de exponer públicamente su vida privada, se vio obligada a mantener el tipo mientras el dúo musical y el conductor del programa se carcajeaban del momento: «Una pregunta... Digo que como no has venido con novia te puedo acompañar yo», le decía ella. «¡Vale! Pasa», le responde sin dudar él. Dicho y hecho. Desconocemos si concretamente Pilar Rubio acompañó al sevillano en el concierto de sus colegas Andy y Lucas, pero sí que lo hizo a partir de entonces. Y que sigue haciéndolo.

El segundo llegó cuando tras el reto semanal al que cada miércoles el programa de las hormigas somete a la reportera, Motos anunció la prueba del próximo día: patinaje entre botellas. Escuchó Rubio la palabra patinaje y se puso rígida. Confesó enseguida que sentía un miedo atroz a los patines desde que hace ocho años, jugando, se cayó de culo mientras intentaba hacer patinaje surfing, enganchada con una cuerda a una furgoneta. Se rompió el coxis, contó. «Y lo pasé muy mal».

La recuperación de este tipo de fracturas es dolorosísima. Pilar Rubio se pasó un mes entero tumbada boca abajo y de rodillas, sin poder sentarse ni colocarse boca arriba. «Pero, ¿sabéis como se arregla eso? -ilustró la presentadora-. La solución es que te metan el dedito por el culo, te lo aprieten y te lo coloquen en su sitio». ¿Se sometió Pilar Rubio a tal práctica sanadora? «Yo preferí que me lo dejasen así, total, si es una cosa que no se ve... ¿querías que me lo metiese más para dentro? No...». «Tiene que doler más la solución», apuntó Lucas.