«Han Solo: Una historia de Star Wars»: la juventud del pícaro más rápido de la galaxia

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Disney vuelve a exprimir la franquicia «Star Wars» con una precuela que nos cuenta los inicios en el mundo del crimen galáctico de un joven Han Solo en una época aún no abordada en anteriores películas. Y con un rostro diferente al de Harrison Ford

24 may 2018 . Actualizado a las 18:36 h.

La máquina de hacer dinero está de nuevo en marcha. Apenas seis meses después de reventar las taquillas con la controvertida Los últimos jedi, Disney nos vuelve a transportar a la velocidad de la luz a aquella galaxia muy, muy lejana con una nueva historia del universo Star Wars. Y con uno de los grandes personajes del cine contemporáneo de aventuras como gran protagonista.

 Es el piloto que siempre tenía «malos presentimientos» y que ganó a las cartas la pieza de chatarra más rápida del universo conocido. El bandido chuleta que respondió al «te quiero» de una inolvidable princesa con un lacónico e inmortal «lo sé». El héroe inesperado que dijo a Luke Skywalker «vuela esa cosa y vámonos a casa» antes de destruir la primera Estrella de la Muerte. Y el padre frustrado que emocionó con su final shakesperiano en El despertar de la fuerza.

 El jueves 24 de mayo Han Solo vuelve a las grandes pantallas. La película es un spin-off de las trilogías oficiales (la segunda tras el éxito de Rogue One) y nos presenta al pícaro contrabandista en los inicios de su carrera al borde de la ley, en una etapa no llevada al cine, la comprendida entre la caída de la república galáctica (que cuentan las tres precuelas dirigidas por George Lucas) y la formación de la alianza rebelde que acabó derrotando al imperio (la trilogía original que concluyó con El retorno del jedi).

 Solo, dirigida por el oscarizado Ron Howard (Una mente maravillosa, Apolo 13, Willow), tuvo un preestreno muy mediático en el Festival de Cannes. El equipo del filme llegó a la Costa Azul rodeado de mucha expectación, los soldados imperiales desfilaron sobre la alfombra roja y hasta el wookie Chewbacca disfrutó de su dosis de glamur. Tras la proyección, efectuada fuera de concurso, llegó el veredicto de la crítica. Y no fue unánime.

 En lo positivo, hay artículos que destacan su capacidad para entretener, su planteamiento coral, su espíritu de aventura clásica, un cierto aire a cine del oeste, trazas de película de ladrones simpáticos y, sobre todo, el saber mantener el sabor de los tres filmes que hicieron de Star Wars un fenómeno global. Eso tiene mérito. Y también una explicación. Detrás del guion está el cineasta Lawrence Kasdan, creador de Indiana Jones y escritor también del libreto del El imperio contraataca, El retorno del jedi y El despertar de la fuerza, y su hijo. Palabras mayores. ¿Garantía de diversión y de éxito? Pues parece que sí, aunque en este caso con ciertas sombras y algunas pegas.

Solo tiene una historia tortuosa. Los responsables iniciales del proyecto, Phil Lord y Chris Miller, lo dejaron en septiembre. Pero no se fueron por voluntad propia. Lucasfilm decidió prescindir de los autores de Lluvia de albóndigas y Lego: la película cuando ya estaba muy avanzada. ¿Las razones? Visiones muy distintas de lo que debería ser el filme, discrepancias en cuanto al ritmo de rodaje y profundos desencuentros sobre la libertad para improvisar más allá del guion. Y recurrió a un experimentado artesano con unas cuantas películas de aventuras en el zurrón, Ron Howard, que volvió a grabar el 70 % del metraje y dio un aire diferente a la película.

 ¿El cambio le ha pasado factura a Solo? De momento no hay una respuesta clara a esa pregunta, pero varias reseñas coinciden en señalar que es inferior a la anterior película derivada de Star Wars, Rogue One. Y creen que sufre a causa de la fórmula Disney: exprimir la franquicia cada seis meses puede provocar falta de chispa y hartazgo en el espectador curioso u ocasional, aunque en este caso no aparezcan jedi ni tampoco miembros de la dinastía Skywalker, hasta la fecha siempre presentes en todas las entregas de la saga.

 La película producida por Lucasfilm ofrece dos grandes cebos a los millones de seguidores de la saga galáctica: por un lado, relata como Han conoció a su inseparable Chewbacca; por el otro, revela las circunstancias en las que, con presuntas malas artes, ganó el mítico Halcón Milenario a su amigo, el también tramposo y encantador Lando Calrissian.

Solo cuenta con un reparto formado por grandes nombres. Por parte femenina destacan tres actrices que han brillado en la pequeña pantalla: Emilia Clarke, la madre de los dragones de Juego de tronos; Thandie Newton, androide rebelde en Westworld; y Phoebe Waller-Bridge, estrella en la emergente Killing Eve. Por la masculina llaman la atención los veteranos Woody Harrelson (True detective) y Paul Bethany (Master and Commander) y Donald Glover, que se pone en la piel de otro personaje mítico de Star Wars, el citado Calrissian. Evidentemente, todas las miradas se concentran en el protagonista, en el actor elegido para coger el legado de toda una leyenda, Harrison Ford. ¿Cumple el joven e inexperto Han Solo de Alden Ehrenreich las expectativas? Pues la crítica no lo tiene claro. Nadie le da un suspenso. Para unos no llega al notable. Pero otros consideran sobresaliente su caracterización de la juventud de un personaje al que tomamos cariño en Star Wars por ser un sinvergüenza simpático. En un entorno repleto de idealistas, su chulería, su cinismo, y su egoísmo aportaban un soplo de aire fresco. En esta película cambian las tornas. Hay humor, pero no héroes clásicos. Ehrenreich, un californiano de 28 años descubierto por Spielberg, considera que su Han Solo es un personaje «completamente distinto al que hemos visto hasta ahora», pero aún así se alegró de recibir el respaldo de Ford: «Honestamente le gustó, y significó mucho para mí». La película reventará taquillas, ¿pero gustará? El público tiene la última palabra. De su veredicto dependerá que veamos nuevas aventuras del joven contrabandista tras su viaje iniciático y su primer coqueteo con el mundo del hampa y del crimen.