La infanta Cristina y Urdangarin disuelven las capitulaciones matrimoniales

Martín Bastos

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Europa Press Reportajes

Un documento firmado de mutuo acuerdo establece que el exduque no pagará pensión por sus hijos ni recibirá prestación económica de su exmujer

20 abr 2022 . Actualizado a las 19:35 h.

La infanta Cristina e Iñaki Urdangarin están ya cerca de hacer efectivo su divorcio. La revista Semana revela en su última edición los detalles del documento que la pareja firmó a finales de marzo para regular las condiciones económicas ya definitivas de la disolución del matrimonio.

Según la publicación, la hija del rey emérito y el exdeportista han puesto ya fin a su vínculo económico con la disolución de las capitulaciones matrimoniales, que habían firmado antes de su boda en Barcelona en octubre de 1997. Ambos se casaron en régimen de separación de bienes y acordaron en un documento cómo se procedería en el caso de un supuesto divorcio, asesorados por abogados del Estado al servicio de la casa real. En él se establecían las condiciones económicas, de fueros y de confidencialidad que regirían en un proceso como el que ahora se está produciendo. La separación de los exduques de Palma se precipitó después de la publicación de unas fotografías de Iñaki Urdangarin en compañía de otra mujer, su entonces compañera de trabajo Ainhoa Armentia.

La disolución de estas capitulaciones se discutió el pasado 22 de marzo en el hotel Four Seasons de Ginebra, según Semana, en una reunión a puerta cerrada entre los dos cónyuges y un abogado facilitado por la casa real española. Una vez acordados los términos, la firma, de mutuo acuerdo, se produjo al día siguiente, el 23 de marzo, según consta en el documento al que ha tenido acceso la revista.

Tras la firma, la infanta Cristina viajó a España y se dirigió a la Zarzuela para que las autoridades del Estado pudieran inscribir este acuerdo en el registro del estado civil de la familia real. Una vez cerrados los términos económicos, el divorcio queda pendiente de la resolución judicial que deberá decidir sobre la custodia de Irene, la única de los cuatro hijos de la pareja que es todavía menor de edad. Cumplirá 18 años en el 2023 y por el momento estudia en Suiza, por lo que la infanta residirá en este país mientras ella concluye su formación. Son los reyes eméritos quienes se encargan de pagar la educación de los jóvenes.

También precisa Semana que Urdangarin no deberá pasar una pensión alimenticia a la infanta ni tampoco recibirá pensión compensatoria a pesar de las diferencias económicas entre ambos miembros de la pareja. El exjugador de balonmano explicó en una entrevista reciente que está intentando «construir un nuevo futuro» y terminando su formación como entrenador del deporte que ahora también practica su hijo Pablo en el FC Barcelona.

Al tratarse de una separación acordada por ambos miembros de la pareja, se espera que el divorcio se produzca en un breve plazo.