Ataques de ira, alcohol y medicación: la cara oculta de Esther Doña

Martín Bastos

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«Yo soy marquesa viuda y tú, un simple funcionario», le reprochó a gritos al juez Pedraz en una fiesta en Ibiza en la que rompieron ante varios invitados

18 nov 2022 . Actualizado a las 16:27 h.

La revista Lecturas revela esta semana nuevos detalles de la polémica ruptura entre Esther Doña y el juez Pedraz y que difieren bastante de la versión que ella había dado hasta el momento. La publicación asegura que el magistrado no rompió su compromiso por WhatsApp. Ella adujo desde el principio que fue un mensaje escrito que ella no se tomó en serio lo que originó un malentendido y que, por esta razón, vendió a ¡Hola! la exclusiva de su compromiso matrimonial cuando, en realidad, ya estaban separados. Publica Lecturas que el juez rompió con ella en persona el 12 de agosto y lo hizo durante una fiesta en Ibiza y ante varios testigos.

Según revela a la revista uno de los invitados presentes en aquella fiesta, la ruptura fue pública después de que Esther Doña la emprendiera a gritos con el juez en uno de los ataques de ira que, según afirman, son habituales en ella. Señalan que Doña se convierte con frecuencia en protagonista de las reuniones sociales «por su airado carácter».

Así ocurrió en la noche del 12 de agosto cuando, «después de algunas copas», empezó a gritarle al juez de forma que todos podían escucharla, algo que no era nuevo, señala la revista, ni para Pedraz ni para sus amistades. «Yo soy la marquesa viuda de Griñón y tú eres un simple funcionario», le dijo entonces de forma airada, acusándolo de aprovecharse de ella para ganar notoriedad. Fue en ese momento cuando, «mirándola a la cara», él le dijo que todo había terminado.

El testigo consultado por la revista sostiene que para la colaboradora del programa Ahora Sonsoles el juez no era suficiente, porque no le proporcionaba la vida de lujos que ella quería. «Ella ha considerado siempre que un caballero es el que retira a su mujer», afirma.

La versión publicada por Lecturas ha dado lugar a varias reacciones por parte de algunos conocidos, como Marina Castaño, gran amiga del fallecido Carlos Falcó. La viuda de Camilo José Cela se pronunció en Espejo Público, asegurando que Esther «es bipolar». «Toma antidepresivos, pero los mezcla con gin tonics y eso es muy mala cosa. Por eso tiene esos arrebatos tan escandalosos que tuvo con Carlos en mi presencia tantísimas veces», añadía, revelando que el padre de Tamara Falcó estuvo a punto de romper con ella en muchas ocasiones, aunque nunca llegó a hacerlo porque pensaba que tenía que darle a su mujer «otra oportunidad».

En la misma línea, Carmen Lomana ha arremetido contra Esther en el mismo programa de Antena 3, tachándola de «psicópata»: «Miente por psicopatía. El juez salió corriendo porque ya se veía como el pobre Carlos Falcó. Esta mujer no tiene límites. Tiene unos brotes que se pone como una fiera, se insulta, se autolesiona y dice "mira lo que me hace Carlos Falcó"», ha asegurado este personaje de la vida social.

La ex madrastra de Tamara Falcó ha anunciado que intentará parar todo lo que se están contando sobre ella y ha publicado un escueto comunicado  en su Instagram: «Esther Doña comunica que ha encargado a su equipo jurídico un estudio pormenorizado de las últimas declaraciones y publicaciones sobre su persona con el fin de iniciar, en su caso, las acciones legales oportunas».

Cambia su anillo de compromiso por unos pendientes

Sobre la bronca en Ibiza que acabó terminando con su relación con el magistrado, Esther Doña ha precisado: «Esa discusión no fue en un yate, fue en la casa y esa discusión la tenemos él y yo por unas cuestiones en las que no llegábamos a un acuerdo. No nos entendíamos, pero eso queda para él y para mí y si él quiere, que lo cuente», como informa Colpisa. En todo caso, con el tiempo, la viuda del marqués de Griñón ve con ojos diferentes el final de su historia con Pedraz: «Yo creo que estaba rota antes; por su parte ya estaba rota, porque si no, no entiendo cómo gestionó todo, pero no me lo había comunicado, estábamos como siempre, como habíamos pasado el verano, de viaje en viaje».

A pesar de la ruptura pública y rocambolesca de la que ha sido protagonista, Esther Doña ha revelado que no ha devuelto el anillo de compromiso que recibió del juez Pedraz, aunque sí lo ha cambiado. «No nos hemos devuelto los regalos y el anillo, me fui a Suárez y lo he cambiado por estos maravillosos pendientes», ha dicho al tiempo que los mostraba a cámara. «Yo no uso anillo y, además, cómo me iba a poner el de pedida», ha comentado.