«Trumpofobia»

Yashmina Shawki
Yashmina Shawki CUARTO CRECIENTE

OPINIÓN

14 nov 2016 . Actualizado a las 08:15 h.

Cada vez estamos más divididos, nos replegamos más hacia nuestros lugares de confort. Cada vez el mundo se hace más grande mientras nos empequeñecemos con nuestra cortedad de miras. La república independiente del yo se extiende por doquier como una mancha de aceite. El avance del populismo de derechas e izquierdas, el triunfo del Brexit en Gran Bretaña, la inesperada y casi incomprensible victoria de Donald Trump en las elecciones norteamericanas, el creciente racismo, el retroceso del feminismo y la irrupción de todo tipo de fobias no son sino el reflejo del retorno a la separación, a la diferencia de clase que ya creíamos superada. Tras décadas de crecimiento de las clases medias, al menos en occidente, de reducción de las capas más desfavorecidas, de la extensión del acceso a la sanidad, la educación y al empleo, ahora el agotamiento del sistema económico y la falta de previsión nos está devolviendo a épocas pretéritas. Los que han ido perdiendo ya no solo capacidad adquisitiva sino, sobre todo, ilusión por el futuro se revuelven contra el estamento político, cada vez más alejado de la gente a pie de calle. Ante el avance de las máquinas y la deslocalización, ante el apoyo al consumo rápido frente al producto de calidad, las clases medias apuestan por el que promete devolver el bienestar pretérito: aunque sea un personaje tan repulsivo como Trump.  Pero, no todos tenemos una visión tan simplista. Muchos sentimos impotencia por haber perdido el tren del progreso y una mayor hermandad y no saber cómo recuperarlos.