El vestido de la Pedroche no es feminista

OPINIÓN

04 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Estoy empezándome a mosquear con todo el tema del vestidito o bañador que Cristina Pedroche llevó en las Campanadas. El hecho concreto que me saca de quicio es que se ponga el vestido como muestra de feminismo, ejemplo de mujer independiente y con capacidad de decisión. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Es un ejemplo claro de machismo caradura y baboso.

El punto a discutir no está en si se quiere o no poner un vestido con el que se le vea hasta el alma. Cada uno se viste como le sale del pie y cada uno hace con su cuerpo lo que quiere. El problema es que no estoy del todo segura de que ella haga lo que quiera, sino más bien lo que le obligan.

Es lamentable que se ponga como ejemplo feminista. Sinceramente, en estos momentos creo que Clara Campoamor debe estar revolviéndose en su tumba ante tanta demagogia barata y una opinión pública voluble. Lo que más pena me da es que Cristina Pedroche crea, o piense que somos tan tontos/as como para hacernos creer que no está ahí por su cuerpo. Hace poco leí una entrevista en la que decía que no estaba en la tele por ser guapa y mucho menos por tener tetas. Y añadía que habría gente más vistosa que ella. No dudo que la haya, también hay gente más preparada y más graciosa, pero no vende.

Pero no hace faltar ser muy listo/a, esa mentira no se la cree ni ella. ¿Por qué a Sara Escudero y Ana Morgade no les dicen que hagan el papel de niña tonta, se pongan vestidos hipercortos y enseñen bien el canalillo?

En su defensa sí tendré que decir que las críticas hacia «su gordura» me parecen excesivas. Gordo está Falete, esta chica creo que tiene un cuerpo con curvas y punto. Esto es un ejemplo del gran peso de los cánones de belleza que se nos imponen, principalmente desde la televisión al dar la imagen de que solo se llega a triunfar si eres muy guapa y con una cintura de avispa.

Para ir terminando, muchos dirán que es envidia, que ya quisiera tener yo ese cuerpo y demás bazofia. Cosa que quiero aclarar que no, puedo poner más de un ejemplo de mujer guapa y que defienda los derechos de las mujeres de verdad, véase Emma Watson. Y mucho menos tengo envidia de su cuerpo. Pero ser una mujer objeto, de manera totalmente descarada, y todavía decir que lo haces como muestra de «feminismo» es de tener muy poca vergüenza.