¿A qué espera Susana Díaz?

Carlos G. Reigosa
Carlos G. Reigosa QUERIDO MUNDO

OPINIÓN

30 ene 2017 . Actualizado a las 08:23 h.

Todo un misterio. ¿A qué espera Susana Díaz para presentar su candidatura a la secretaría general del PSOE? Debe de saber que sus frases crípticas solo alimentan un misterio que ya no debería ser tal. Porque el PSOE debe moverse en la luz y rehuir las aniquiladoras oscuridades que tanto daño le han hecho. Ahora solo nos faltaría que unos saliesen a gallear (Patxi López y Pedro Sánchez) y otros a jugar al escondite (Susana Díaz), mientras la desilusión crece y muchos ya temen que esto no tenga fácil arreglo.

No siento especial predilección por Susana Díaz, pero sé que ha llegado su momento, ese para el que uno, queriendo o sin querer, se ha estado preparando. Si Gabriel García Márquez estuviese vivo, quizá se lo explicaría con una de sus inmortales frases sobre el amor: «Dile que sí, aunque te estés muriendo de miedo, aunque después te arrepientas, porque de todos modos te vas a arrepentir toda la vida si le contestas que no». Creo que este es el trance de Susana. Quizá ni ella se cree la más indicada, pero los dados ya rodaron y le han otorgado la condición de candidata probablemente ganadora.

¿A qué espera para sacarnos de esta incertidumbre? Si no quiere liderar el PSOE ya debiera haberlo dicho. Y si quiere, debe anunciarlo cuanto antes. Patxi López, que pasaba por allí, ya ha hecho su apuesta, y Pedro Sánchez acaba de anunciar su decisión de intentar volver. ¿Qué más necesita saber la presidente andaluza? Las demoras a veces arrojan luz, pero, en circunstancias como esta, solo siembran oscuridades.

Todos sabemos dos cosas muy simples: que el PSOE no ha parado de encadenar errores hasta la designación de la comisión gestora encabezada por Javier Fernández y que ahora es urgente abrir una nueva etapa antes de que se les pase el arroz a quienes deben ofrecerse para liderarlo. Ni siquiera es necesario ser de la cofradía socialista para darse cuenta de que el PSOE es un partido indispensable para la buena marcha de España; por ello, propios y extraños debemos desearle lo mejor. No corren tiempos propicios para que les regalen más opciones a los extremistas de uno u otro signo. El PSOE debe recuperar cuanto antes su espacio de centroizquierda, socialdemócrata. Por el bien de todos.