Ataque a las puertas de Westminster

Yashmina Shawki
Yashmina Shawki CUARTO CRECIENTE

OPINIÓN

23 mar 2017 . Actualizado a las 08:52 h.

Ha vuelto a suceder. A pesar de que estamos en alerta y las fuerzas de seguridad de la mayoría de los países están desplegadas en todos los lugares sensibles y estratégicos, un asesino ha logrado sembrar el horror en uno de los emplazamientos más emblemáticos de Londres, y, por extensión, de todo el Reino Unido, el puente de Westminster, en las inmediaciones del Parlamento británico. Una vez más, un hombre conduciendo un vehículo se lanzó contra los viandantes que caminaban por el puente para después abalanzarse contra la verja del Parlamento. No satisfecho con haber atropellado a varios peatones, disparó a un policía y después hirió a otro con un cuchillo. El balance asciende a cinco muertos, entre ellos un policía y el atacante, y cerca de cuarenta heridos, algunos muy graves. 

Parece que el atacante es un personaje radicalizado, lo que unido al lugar y al día elegido corroboran que se trata de un atentado terrorista islamista. Así, por una parte, el ataque se ha cometido en las inmediaciones del Parlamento, que representa la cuna de la democracia moderna en Occidente, y por otra, ha tenido lugar en el aniversario del atentado cometido en Bruselas el año pasado. Es muy probable que el número de víctimas y el impacto ocasionado hayan sido sustancialmente menores a lo que el terrorista hubiera deseado porque se trata de un lugar fuertemente vigilado, pero el impacto emocional es de gran calado. Aun así, lejos de bajar la guardia tenemos que reforzarla, pero sin ceder jamás al miedo ni cambiar nuestro modo de vida.