Golpeados por el terror

Yashmina Shawki
Yashmina Shawki CUARTO CRECIENTE

OPINIÓN

24 may 2017 . Actualizado a las 08:09 h.

La noche del lunes 22 de mayo tendría que haber terminado con alegría tras el concierto de Ariana Grande en Mánchester. Sin embargo, los más de 21.000 asistentes, la mayoría adolescentes, no pudieron rematar peor la velada. Un terrorista hizo estallar un artefacto casero causando la muerte a 22 personas, algunas de ellas niños, y sesenta heridos. 

Obviamente, ninguno de los elementos de este atentado fue escogido al azar. En primer lugar, el objetivo, un concierto con asistencia masiva de jóvenes, representa uno de los anatemas más detestados por los islamistas radicales porque supone una celebración con música donde se mezclan chicos y chicas para bailar y cantar. En segundo lugar, es un golpe al tramo más vulnerable de nuestra sociedad, los jóvenes, que son el futuro de nuestra sociedad y de nuestro modo de vida. En tercer lugar, no se ha producido en la capital, supuestamente muy protegida, sino en el norte del país, en una de las ciudades más cosmopolitas del Reino Unido y en la cual la comunidad musulmana es bastante numerosa. Y en cuarto lugar, la fecha no podía ser más significativa: dos meses justos tras el atentado cometido en Westminster y a dos semanas de que tengan lugar las elecciones legislativas en el Reino Unido. Un acto así es, sin duda, la leña que los defensores del cierre de las fronteras a cal y canto, como UKIP, van a utilizar para captar votos.

Sin duda, es un ataque destinado no solo a causar muchas víctimas sino, sobre todo, a influir en el ánimo de la población. Una población que, sin embargo, tal y como manifestó Theresa May en su declaración de ayer por la mañana, no va a dejarse amedrentar y que seguirá defendiendo su modo de vida de la manera que más irrita a los terroristas: volviendo a la normalidad.