El señor Bárcenas

Enrique Clemente Navarro
Enrique Clemente LA MIRADA

OPINIÓN

26 jun 2017 . Actualizado a las 08:32 h.

No lo sé, no me consta, lo desconozco, no lo recuerdo, no tengo ni idea. El responsable era Álvaro Lapuerta, el extesorero que estuvo imputado en el caso Gürtel, pero no puede ser juzgado, por sufrir demencia sobrevenida. ¿Y Luis Bárcenas? Un mindundi que actuaba como chico de los recados. Este es el resumen de las declaraciones ante la Audiencia Nacional, en calidad de testigos, de cinco pesos pesados de la época de José María Aznar, que lo fueron todo en el partido y en el Gobierno: Rato, Acebes, Mayor Oreja, Álvarez Cascos y Arenas, el gran superviviente que aún resiste al lado de Rajoy. Un festival de desconocimiento y amnesia. Todos siguieron el mismo guion, algo que hemos visto en las películas sobre la mafia y el hampa: echar la culpa al muerto, en este caso al demente octogenario. Mientras, el mismo Bárcenas al que los cachorros del PP llamaban hace bien poco delincuente, mentiroso compulsivo e incluso decían que les daba asco, ha pasado súbitamente a ser «el señor Bárcenas». Alguien respetable. Los insultos eran de los tiempos en que Bárcenas decía que Rajoy recibía sobres de Lapuerta y amenazaba con tirar de la manta. A este paso oiremos que es un tipo estupendo y que todo ha sido un lamentable malentendido. Porque, tras amagar con dar y no dar, el extesorero ha decidido seguir el consejo del presidente: está siendo fuerte y se encuentra en vías de volver a ser «uno de los nuestros». Ha entendido que calladito está más guapo y que la omertá es más favorable para sus intereses penales que largar todo lo que sabe. Bárcenas acudirá hoy a la comisión de investigación sobre la financiación del PP para no decir nada. Si parece un pacto y funciona como un pacto, lo más probable es que sea un pacto.