España, campeona de Europa y bronce mundial

OPINIÓN

11 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La verdad es que estoy atizando al gobierno con casi todas mis columnas, y es justo que reconozca algunos de sus logros. Y no solo del gobierno actual. También, en parte, de los precedentes. Veamos cuál es la posición de España respecto a sus referentes europeos (y mundiales, puntualmente) en algunos de los aspectos que dependen directamente de la gestión del gobierno, y de los que depende, a su vez, nuestro bienestar. Esto nos ayudará a ver cuáles son sus prioridades; porque por sus prioridades los conoceréis.

En España el gasto público representa el 42,2% del Producto Interior Bruto (PIB), mientras que la media de la Unión Europea se sitúa en un 46,3%. Estamos, pues, más de cuatro puntos por debajo de la media. Lo que nos lleva a estar por debajo de la media en casi todos los indicadores. Veamos cómo se distribuye este gasto y cómo nos encontramos respecto al resto de la Unión Europea.

España se encuentra muy por debajo de la media en gasto social, es decir, en la parte del presupuesto que el gobierno destina a satisfacer las necesidades básicas de la ciudadanía, financiando los servicios sociales básicos (sanidad, educación, pensiones, etc.). Mientras la media de la UE es del 29% del PIB, en España es del 24,7%. Y, según se desprende de las propuestas del gobierno, bajando aún más.

Desglosando algunos capítulos, y en una clasificación en función del tanto por ciento del PIB de 28 países (aún) de la UE (estadísticas oficiales), obtenemos lo siguiente:

En protección social ocupamos el puesto 13, aunque por debajo de la media ya que países como Finlandia o Francia gastan en este concepto alrededor del 25% del PIB mientras que en España gastamos el 16,8%.

Por ejemplo, en gastos para los mayores obtenemos un duodécimo puesto, pero por debajo de la media también. Y en familia-infancia, aquello de lo que el PP es tan devoto, el puesto ¡27! En gasto en desempleo, el quinto puesto, aunque cabría esperar una posición mejor, teniendo en cuenta que somos subcampeones en paro, solo superados por Grecia. En exclusión social, puesto 19. Y en políticas de vivienda, el 28. Teniendo en cuenta que la Comisión Europea considera que España se encuentra en una situación crítica en aspectos como la desigualdad salarial, nos hacemos una idea de cuánto se preocupa este gobierno por quienes más necesitan.

En salud, ocupamos la decimoquinta posición; aunque en servicios ambulatorios (sanidad) somos los primeros, todavía.

El gasto público en educación, aquello que ha de servir para que las siguientes generaciones se puedan labrar un futuro mejor, nos lleva hasta el puesto 23; de 28, no lo perdamos de vista.

En transporte, puesto 25. En cultura, en la media. Y en protección del medio ambiente, ligeramente por encima; puesto 8.

Sin embargo, en orden público y seguridad, donde los países supuestamente más avanzados caen a las últimas posiciones de la tabla, España salta por encima de la media de la UE para situarnos en el duodécimo puesto.

Y en defensa, mientras el gobierno cumple con el compromiso de duplicar el gasto militar en los próximos siete años para lograr así superar la media de la UE, estamos en la décima posición.

Y aquí sí, en esto ganamos la Champions con soltura: pagando multas por incumplir la normativa comunitaria. Desde 2012 hemos pagado 7 de cada 10 euros que la Comisión Europea ha ingresado por este concepto.

Y si nos asomamos a los mundiales, España obtiene la medalla de bronce en una clasificación de economía sumergida, por detrás de Grecia e Italia. Una afición muy mediterránea, parece.

Y en corrupción, ¡ay! en corrupción; estamos en el puesto 42 de un total de 180 países del mundo, por detrás de Botswana, Costa Rica o Dominica, a lado de Georgia, Malta, Cabo Verde y Ruanda; y bajando desde 2012. Menos mal que este gobierno se ha tomado esto en serio y ha adoptado medidas de lucha contra la corrupción. Si no, yo ya no sé dónde estaríamos…

Y, para rematar, España es campeona de Europa y medalla de bronce en los mundiales… ¡de puteros! Así es, España es el primer país de la UE y tercero del mundo en demanda de prostitución.

Estamos como queremos.

¿Y la próxima semana? La próxima semana hablaremos del gobierno.