Menudo chollo, Adam Smith

Fernanda Tabarés
Fernanda Tabarés OTRAS LETRAS

OPINIÓN

MARCOS MIGUEZ

21 oct 2018 . Actualizado a las 10:01 h.

La multinacional danesa Vestas ultima su cierre en León 16 años después de abrir y de recibir más de 12 millones de euros en ayudas. Los concellos de Vigo, A Coruña y Santiago pagan cada año 11 millones a aerolíneas de bajo coste para que operen en los aeropuertos gallegos. La inyección no ha disuadido a Vueling de cancelar más de veinte vuelos desde junio. Nissan anunció en 2008 el despido de 1.680 personas de su fábrica de Barcelona pese a haberse tragado 43 millones en tres años. Los trabajadores de las plantas de Alcoa en A Coruña y Avilés serán puestos en la calle aunque la multinacional americana ha percibido entre 500 y mil millones de todos nosotros. Saquen las palomitas porque lo que proyectan por aquí es una nueva versión de un género de ficción llamado capitalismo. Va de multinacionales que ejercen un chantaje al que las administraciones sucumben en una estrategia desesperada por mantener esa cosa muy rara llamada empleo. Esta curiosa forma de entender el libre mercado no impide ni la precariedad laboral ni el maltrato a los clientes, a quienes las grandes transnacionales consideran rehenes por quienes pueden pedir suculentos rescates. El capitalismo es esa doctrina que opera firme con la chusma y afloja con las multinacionales. Es bastante factible que a usted le apliquen los rigores más extremos del sistema y que el dueño de esa transnacional de ahí no pague impuestos y reciba friegas económicas constantes en una nueva versión del socialismo en virtud de la cual las grandes empresas son de propiedad y beneficios privados pero su financiación es colectiva y pública. Adam Smith, menudo morro, darling.