Ni rebrotes ni crispación

Diego Valiño
Diego Valiño REDACCIÓN

OPINIÓN

26 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El Gobierno Nacional consiguió ayer sacar adelante en el Congreso el decreto de Nueva Normalidad y en el diálogo social con empresarios y sindicatos ampliar los ERTE hasta septiembre. Sigue siendo una incertidumbre el futuro más próximo, desde si habrá un rebrote importante que obligue a decretar el Estado de Alarma hasta cómo se van a adaptar los colegios para el próximo curso escolar. Ante el inicio hoy de la campaña electoral en Galicia y Euskadi, PSOE y Unidas Podemos trabajan en unas conclusiones conjuntas para la comisión parlamentaria para la reconstrucción, antesala de lo que pondría ser la negociación de los partidos que sustentan el ejecutivo para la negociación de los presupuestos, que se aventura complicada pero que si se sigue prorrogando la sobra de Montoro seguirá rigiendo las cuentas públicas.

Jorge Javier Vázquez y Belén Esteban se han colado en el debate político-mediático (no es la primera vez que ocurre) y Vox ha señalado a los anunciantes de Sálvame para promover un boicot. Telecinco ya tiene alguna experiencia en este sentido pero no parece que este programa célebre de su programación pueda desaparecer (además desde hace tiempo se reestructuró en tres partes para poder continuar con su emisión, aunque a la postre sigue siendo uno). Pero el problema no está en un plató de televisión, sino en la cámara baja con personas como Macarena Olona que por mucho que griten nunca van a tener la razón.

El domingo es el día del Orgullo, y como otras tantas manifestaciones y celebraciones se tendrá que reducir a una jornada reivindicativa muy online, aunque están previstas también marchas como en Gijón/Xixón. Tristemente en Oviedo/Uviéu tenemos un ejemplo de un lugar donde se ha dado en el último año pasos atrás en mostrar el orgullo por una sociedad diversa y plural contra la homofobia y la intolerancia. A La Escandalera el bipartito le ha quitado unos bancos que nos representaban a todas y a todos, pero no me quedo solo con el simbolismo y me uno una vez más a los colectivos sociales que piden una igualdad real (no solo legal). La derecha siempre se aparta o esquiva cualquier iniciativa para mejorar nuestras vidas, y a modo de ejemplo está su insistente oposición al feminismo, al que poco menos le ha acusado de que en este país hayamos tenido que estar confinados en nuestras casas hasta hace unos días. No obstante parece que han olvidado sus ataques al 8M por los pasajeros del Aeropuerto de Barajas.

Crucemos los dedos para que no haya rebrotes pero tampoco más crispación aunque estemos ya con dos elecciones autonómicas a la vista.