Fernando Simón vuelve a atragantarse

OPINIÓN

Fernando Villar | Efe

04 nov 2020 . Actualizado a las 15:31 h.

Para atragantarse con una almendra, primero hay que abrir la boca. No termina de enterarse Fernando Simón, que ya en mayo sufrió un conato de ahogamiento: «El problema —dijo— es que me comí una almendra». La anécdota se convirtió en sudadera. En este país das una patada a una piedra y salen corriendo un puñado de haters y otro de fans. Al director del centro de emergencias sanitarias de uno de los países más golpeados por el coronavirus le sobra el tiempo para engullir almendras a destiempo. Ergo, acaba atragantado. Ahora, con un lamentable comentario sobre las enfermeras. Aquí anda el hombre, presuntamente compungido, pidiendo disculpas «ante una broma muy tonta», esos «reflejos aprendidos». Acaso le pesan los focos, la corona de la tele, pero, definitivamente, a Simón le cuesta ser políticamente correcto. Claro que muy científicamente correcto tampoco termina de ser. Pues aquí no iba a pasar nada, y basta ver cómo está el país.