El futuro que viene

Juan Francisco Amil Míguez ECONOMISTA, AUDITOR Y DIRECTOR GENERAL ADJUNTO DE EMALCSA

OPINIÓN

Nacho Doce | Reuters

19 jul 2021 . Actualizado a las 09:06 h.

La economía, la sociedad y las empresas postcovid están provocando una transformación sin precedentes en un mundo cambiante en donde el modelo económico y social está dando un giro de 180 grados. Nada será igual a partir de estos momentos. La innovación sanitaria, la tecnología, el teletrabajo, los hábitos sociales y de consumo, las energías renovables, los centros de producción y distribución y un largo etcétera nos llevan hacia un mundo hiperconectado, en donde el equilibrio y cambio de poder económico nos llevará hacia otro orden mundial: China y los países emergentes, más pronto que tarde, serán eje de referencia frente a EE.UU. y las potencias actuales.

Ante esta disrupción del modelo económico, voy a tratar de recoger algunos de los cambios que se están ya produciendo:

1.- La innovación sanitaria avanza a velocidad de crucero: la investigación para la obtención de nuevas vacunas anticovid, la posible cura del cáncer en el próximo decenio, los robots al servicio de la salud y el papel que China jugará en los próximos años en la producción de nuevos fármacos a precios más bajos son factores, además del I+D, que nos colocarán en otra situación.

2.- El cambio del sistema económico deberá tener en cuenta tres factores: la salud, el bienestar y nuestra relación con el planeta. El libre mercado tal y como lo conocemos ha muerto. Las clases sociales serán mucho más sensibles a cambios. Iremos hacia una sociedad más igualitaria. La clase media será más vulnerable por representar un modelo de vida obsoleto en la sociedad que nos espera.

3.- La digitalización, la robótica y las nueva tecnologías abren un gran espacio y nuevas oportunidades de negocio para quien tenga capacidad de adaptación a un mundo cambiante en donde el ser humano requerirá necesidades muy diferentes a las que hemos venido generando.

4.- El dinero en efectivo tiene fecha de caducidad a corto plazo. Se acelera el proceso hacia «el plástico», reduciendo la economía sumergida y facilitando la lucha contra el fraude. En los países emergentes muchos consumidores no tienen cuenta corriente pero sí un teléfono móvil. Las generaciones actuales ya utilizan estos medios de forma habitual.

5.- Las emociones pueden dominar el discurso político, mientras está en riesgo nuestra salud. El discurso emocional marcará la actuación política. Pero intervenciones de esta índole podrían degenerar en demagogia y manipulación social, elementos preocupantes para el individuo y la sociedad.

6.- El ocio digital cobrará especial protagonismo. El sector de los videojuegos mantendrá un fuerte crecimiento. Los juegos y el ocio ante las computadoras se convertirán en un hábito, poniendo en peligro las relaciones personales. La explosión del streaming y de la tecnología permitirá asistir a espectáculos y diversos eventos a un coste menor. Todo ello tiene grandes amenazas.

7.- Las energías renovables impulsarán el mundo. Muchas compañías de gas y electricidad están generando más del 30 % de sus ingresos con actividades de esta índole. Algunos gobiernos europeos han establecido elevados objetivos de descarbonización. Las emisiones de CO2 están teniendo un impacto brutal sobre el planeta. La Directiva de Energías Renovables estipula para el 2030 que un mínimo de un 32 % de la electricidad deberá proceder de energías renovables. El precio actual es insostenible en una sociedad moderna. Los paneles solares tendrán un gran protagonismo, no podemos obviar que el 1 % de la energía del mundo actual se genera con el sol. Quizá hacia el 2030 toda podría ser solar.

8.- China estará en el punto de mira. El gigante asiático está comenzando a aprovechar esta crisis para blanquear su imagen e incrementar y confirmar su posición hegemónica. Es posible que el poscovid rubrique el fin del dominio estadounidense y el comienzo de «una nueva era».

9.- La hiperconectividad es una realidad en aumento: el teléfono, el reloj, el coche, la tele, el frigorífico... están conectados a Internet en el 2021: 3.000 millones de personas en el mundo estamos conectadas hoy. En un tiempo no muy lejano seremos 7.500 millones de personas conectadas a la Red; Google, Facebook y alguna otra empresa están avanzando en la búsqueda de nuevas conexiones a través de redes wifi, usando drones y otras alternativas que extiendan al mundo las nuevas tecnologías.

10.- Los cambios tecnológicos están afectando a los hábitos de consumo, a la oferta y demanda mundial de bienes y servicios, a la logística, a la deslocalización y a la traslación continental del modelo económico. Habrá un cambio de poder económico de la vieja Europa hacia los países emergentes, con China a la cabeza.

Estos aspectos nos deben hacer meditar sobre las nuevas realidades a las que podríamos enfrentarnos en un nuevo orden económico mundial, en donde quizá las políticas monetaristas actuales, ya amortizadas por un sistema económico caduco, deberían dar paso a un nuevo modelo para liderar el «mundo que viene».