Boris Johnson a pedales

OPINIÓN

DPA | Europa Press

06 oct 2021 . Actualizado a las 13:54 h.

Este hombre que posa en plan infierno del norte en el congreso de los tories tiene aspecto de haberle dado a los pedales menos que el patriarca de los Simpson. Se las prometía felices, Boris Johnson, cuando se convirtió a la cruzada anticovid. No es que todo estuviera en su sitio —basta ver su cabello, como si un secador invisible rondara permanentemente su cabeza—, pero hubo un tiempo en el que parecía intocable. Ahora lo tiene crudo en las encuestas y en las gasolineras. La sombra del brexit es alargada: no hay manos inmigrantes para transportar combustible, o reponer arroz en los lineales de los supermercados. He aquí un pueblo autosuficiente. Sufre ahora el Reino Unido y le va a tocar sufrir a Boris, aunque en su caso el sufrimiento será puntual. Por mucho que la gasolina siga sin fluir, este hombre va a dar las pedaladas justas. Más tarde o más temprano, el premier británico acoplará a su bici un sidecar. Y no hay que ser Nostradamus para adivinar dónde se va a sentar.