Una perspectiva sobre las enfermedades infecciosas

Philip Felgner PREMIO PRINCESA DE ASTURIAS DE INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA Y TÉCNICA Y UNO DE LOS PADRES DE LAS VACUNAS CONTRA EL COVID-19

OPINIÓN

PILAR CANICOBA

20 oct 2021 . Actualizado a las 08:42 h.

En los tiempos modernos, el brote de covid-19 ocupa actualmente el tercer lugar -detrás de la gripe de 1918 y el sida- en número de muertes por infección. En menos de dos años, la llamada «gripe española» causó entre 17 y 100 millones de muertes en todo el mundo. La identificación cuidadosa de las variantes emergentes de la gripe y las vacunas contra la gripe estacional específicas se introdujeron como una respuesta eficaz para mitigar las consecuencias para la salud pública del siguiente brote de gripe, y, todavía hoy, sigue siendo una prioridad una vacuna universal contra la gripe.

En 1981 se reconoció el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida) y, desde entonces, ha causado 35 millones de muertes. El retrovirus VIH-1 que provoca la enfermedad se identificó en 1984. El fármaco AZT desarrollado en la década de 1960, que inhibe la actividad de la transcriptasa inversa en retrovirus, recibió la aprobación de la FDA para el tratamiento de esa enfermedad en 1987. El tiempo transcurrido entre la primera demostración de que el AZT era eficaz contra el VIH en laboratorio y su aprobación fue de 25 meses, el período más corto de desarrollo de fármacos, hasta ahora. En los países desarrollados, con el uso de una combinación de medicamentos antivirales, la infección por VIH constituye una enfermedad tratable. Las muertes anuales en todo el mundo, que alcanzaron un máximo de dos millones por año en el 2005, se encuentran actualmente en un millón por año y disminuyen gradualmente.

Desde abril del 2020, las muertes en todo el mundo por covid se calculan en ocho millones de personas, y, actualmente, se estima una tasa de 10.000 muertes/día (3,5 millones de muertes/año). Los costes mundiales en sufrimiento humano, las consecuencias sociales y económicas, son comparables a los de la gripe de 1918 y el sida. Pero el rápido ritmo de descubrimiento y desarrollo de las espectaculares vacunas contra el covid ha tomado por sorpresa a los vacunólogos, a la comunidad científica y al público. La fabricación y aprobación en diez meses de vacunas de ARNm eficaces, de las que ya se han producido más de mil millones de dosis, ha elevado el ARNm al rango de casi salvador del mundo. Puede que parezca que estas vacunas han surgido repentinamente, pero su advenimiento se basa en más de 30 años de descubrimientos científicos, discurso y desarrollo, el trabajo de cientos de científicos, numerosas empresas de biotecnología y miles de millones de dólares públicos y privados invertidos que permiten esta respuesta efectiva en este momento.