Vacunas y ómicron

María del Mar Tomás Carmona MICROBIÓLOGA DEL HOSPITAL A CORUÑA. INVESTIGADORA DEL INSTITUTO DE INVESTIGACIÓN BIOMÉDICA (INIBIC) Y PORTAVOZ DE LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE ENFERMEDADES INFECCIOSAS Y MICROBIOLOGÍA CLÍNICA

OPINIÓN

DPA vía Europa Press

15 dic 2021 . Actualizado a las 10:02 h.

Teniendo en cuenta la situación actual de la pandemia, es muy probable que todos lleguemos a tener en algún momento contacto con las variantes del SARS-CoV-2. Es por ello que cada vez es más recomendable la vacunación en todas las edades, siempre que las dosis sean aprobadas por las agencias reguladoras FDA y EMA.

La llegada de la variante ómicron podría provocar un incremento en el número de casos. Recientes estudios han mostrado un mayor riesgo de reinfección (2,4 veces) por dicha variante en pacientes que han pasado la infección natural, en comparación con las otras variantes.

Un reciente trabajo muestra una eficacia del 75 % de la vacunación completa de ARN (con refuerzo o tercera dosis) frente a la infección sintomática, y en torno al 90 % frente a la infección grave, evitando hospitalizaciones y muertes.

Es importante destacar que tener contacto con el virus tras la vacunación completa garantiza una respuesta inmunitaria fuerte y adecuada, con mayor protección frente a nuevas variantes. Diversos trabajos analizan dicha inmunidad tras la infección por la variante delta. Los individuos vacunados desarrollaron respuestas robustas de anticuerpos y de células T después de la infección con esta variante del SARS-CoV-2. Estos datos sugieren importantes beneficios inmunológicos de la vacunación en el contexto de infecciones irruptivas, evitando complicaciones a corto y largo plazo. Se requieren estudios de dicha inmunidad posinfección frente a la variante ómicron en los pacientes vacunados.

Las vacunas adaptadas a la nueva variante tardarán meses en llegar a la población y hasta la fecha se está determinando la necesidad de una vacuna pan-coronavirus, que sea eficaz frente a diversos coronavirus de la familia de SARS-CoV-2 y sus variantes.

En conclusión, la nueva evolución de la pandemia del covid-19, junto con la aparición de la variante ómicron, vuelven a confirmar lo dicho hasta el momento: las vacunas, junto con las mascarillas, ventilación y distancia social, siguen siendo las mejores recomendaciones a seguir.