Protegernos de la quiebra

OPINIÓN

MABEL RODRÍGUEZ

17 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Espero, y lo digo rotundamente, que esta nueva crisis no contagie a economías como la nuestra, porque los efectos que hemos sufrido desde la caída de Lehman Brothers hasta hoy no han podido ser más perjudiciales en nuestras vidas. Ojalá que los controles que se establecieron en su día (aquello que decía Sarkozy de «refundar el capitalismo») sean efectivos para que las tensiones no vayan a más. Por ahora son conocidos dos casos (Silicon Valley Bank y Credit Suisse) y los que saben de esto aseguran que estamos más bien ante un problema bursátil (el pánico y el miedo en las bolsas). Como bien dijo Joe Biden, los inversores saben el riesgo al que se someten invirtiendo sus dineros en estas operaciones (cuando obtienen grandes beneficios no los reparten con nadie pero cuando el agujero no es posible de tapar llaman a Papá Estado a arreglar el desaguisado), con lo cual no pueden justificar ser víctimas del sistema cuando están participando activamente en el juego. Ayer el Banco Central Europeo decidió una nueva subida de los tipos de interés y aseguró que si fuera necesaria su intervención proporcionará la liquidez para garantizar la estabilidad de la zona Euro. Gobiernos como el español siguen lanzando un mensaje de tranquilidad (supongo que con el objetivo de evitar reacciones descontroladas de clientes que tienen sus ahorros depositados en entidades bancarias), con lo que hay que confiar en que al menos en Europa hemos aprendido a protegernos de la quiebra financiera y de la volatilidad de los mercados.

La polémica en la que están envueltos el Vicepresidente del Gobierno de la Comunidad de Madrid (Enrique Ossorio) y la líder de la oposición (Mónica García, de Más Madrid) al haber cobrado (legalmente, por ser familia numerosa) el bono social eléctrico para consumidores vulnerables (aunque no necesiten esa subvención por sus rentas) ha creado un nuevo ejemplo para quienes están interesados en denigrar y desprestigiar a la política. En el caso del primero cabe recordar que es alguien que niega que haya pobres en Madrid y que habla con desprecio de las ‘paguitas’, muy necesarias para muchas familias en este país (es prácticamente imposible pagar los costes de la energía en muchos casos) a las que hay que proteger de la quiebra, porque hay unos mínimos a los que todas y todos tenemos que tener acceso, y calentar nuestras casas no puede considerarse un privilegio. En el caso de Mónica García cabe decir que se cubrió de gloria, porque por la mañana aprovechó la situación para pedir la dimisión de Ossorio y por la tarde, tras pedir perdón y decir que va a devolver lo cobrado, argumentó que desconocía que lo cobrase porque es automático percibirlo, algo que el candidato del PSOE a la Comunidad de Madrid, Juan Lobato, explicó ayer en el pleno de la Asamblea madrileña que no es cierto. Veremos en qué acaba la cosa, porque imagino que se estará buscando a más que perciben esta subvención políticos (ayer se hablaba de que Alfonso Serrano se beneficia de un bono para consumidores vulnerables severos y Rocío Monasterio del eléctrico), pero a ver si cuando explique sus motivos no se va por los cerros de Úbeda.