La polémica sobre las fiestas mateínas no conoce tregua ni en su día grande, con el alcalde defendiendo el «éxito» del festejo y el portavoz popular pidiendo «un cambio» para próximas ediciones
21 sep 2016 . Actualizado a las 16:13 h.«»
La controversia política en torno a San Mateo no ha conocido tregua ni siquiera en el día grande de las fiestas de Oviedo. El alcalde de la ciudad, el socialista Wenceslao López, ha dicho que ve a los concejales del PP «enrabietados» ante las «grandiosas» celebraciones, mientras el portavoz del PP en la corporación y exalcalde, Agustín Iglesias Caunedo, afirmaba, tras la recogida del popular bollu mateín en la Plaza de España, que las de este año «han sido unas fiestas bastantes pobres si las comparamos con años anteriores», por lo que ha pedido «un impulso y un cambio importante» de cara a las próximas ediciones.
El primero en mostrar su parecer sobre las fiestas ha sido Wenceslao López, que ha defendido el modelo festivo propuesto por el tripartito local de PSOE, Somos e IU, argumentando que «Las fiestas están siendo un éxito porque la ciudadanía está disfrutándolas», en línea con las declaraciones realizadas ayer por el concejal de Festejos, Roberto Sánchez Ramos. López ha señalado que se trata de unas fiestas «abiertas a toda la ciudadanía, a bajo coste y grandiosas, con todo tipo de actividades», ha comentado. Como ejemplo de ese éxito, ha recordado que en la madrugada del marte hubo incluso que cerrar los accesos a la Plaza de la Catedral unos 20 minutos debido a la gran afluencia de público y aceptación de la programación.
Frente a ello, ha lamentado que haya «una parte de la corporación, que son los que han gobernado durante 24 años este ayuntamiento» a la que «no le gustan las fiestas y están un poco enrabietados». «Supongo que se les pasará a partir del lunes cuando vean que los ovetenses se han divertido y lo han pasado bien; lo lamento por ellos, porque son tiempos de diversión y no de cabreo», ha añadido.
Por su parte, Agustín Iglesias Caunedo, arropado por sus compañeros de grupo tras asistir a la misa mayor en honor a San Mateo, ha insistido en la necesidad de un cambio en los próximos años y ha señalado que «los grandes perjudicados» de las carencias en la programación festiva sean «los niños y niñas de Oviedo», debido a la falta de actividades infantiles, lo que, según ha afirmado, ha generado «numerosas quejas de los ovetenses».