«Asturias está a menos de 20 días de tener encima un problema medioambiental de enormes consecuencias», denuncia Ovidio Zapico
10 abr 2018 . Actualizado a las 19:40 h.Izquierda Unida ha mostrado su preocupación y descontento y han reclamado ayuda ante la falta de apoyo por parte del Principado con la situación actual de las playas. El pasado 26 de marzo, tras una asamblea en la Federación Asturiana de Concejos (FACC), se reunieron todos los ayuntamientos costeros con la Dirección General de Administración Local. Allí les prometieron trabajar en el tema pero tras casi 20 días no se ha obtenido respuesta. «No queremos que dejen tiradas las playas ni tener esta incertudumbre», ha señalado la alcaldesa de Castrillón, Yasmina Triguero. La temporada estival comenzará en apenas dos meses y las playas, que están llenas de basura, no están en condiciones de ser visitadas ni disfrutadas.
«Ineficacia, ineptitud e incomprensión» son las palabras que utiliza Gabriela Álvarez, secretaria de Política Municipal, para describir la actuación inexistente por parte del Gobierno queriendo trasladar el problema a los ayuntamientos. Hay un total de 21 municipios en esta tesitura, contando los 19 que tienen playa y los dos restantes, Avilés y Vegadeo, con rías. A mediados de abril no hay aún medidas para esta limpieza, dejándola en manos de las administraciones locales que deben asumir unas responsabilidades y habilidades que no les competen.
Desde Izquierda Unida se pide una solución real, que es la de modificar los Estatutos Autonómicos para 2019, como se habían planteado rectificar en el pasado mes noviembre. «Estamos pidiendo casi socorro desde las administraciones locales. Hay muy poca participación a la hora de distribuir las competencias entre las administraciones, que son tuteladas, cuando la estatal, autonómica y local están recogidas en la Constitución sin ningún tipo de jerarquía entre ellas. Las tres tienen las mismas posibilidades de desarrollo de los servicios que prestan y en teoría tenemos que tener la suficiente autonomía para desarrollarlas. Aquí no, estas competencias se nos atribuyen sin la participación de los ayuntamientos y al final tenemos que prestar los servicios sin las garantías económicas ni jurídicas», apela Triguero.
Otro problema es el de la acumulación de madera en las playas a lo largo del año, de la cual se tiene que hacer cargo el ayuntamiento de cada municipio, sumándose a veces madera de otros concejos que no tienen costa pero que también acumulan residuos. Desde 2011, era la empresa COGERSA la que se ocupaba de esto pero hubo reparos por parte del organismo, los cuales tenían subvenciones por parte del Gobierno que fueron retiradas. Se suma también la introducción de una tasa a cargo de los ayuntamientos costeros que no incluiría a los municipios del interior y que en otras comunidades autónomas o regiones uniprovinciales como Cantabria o Ferrol corre por parte de la Comunidad Autónoma, las cuales dan subvenciones a las localidades.
«Exigimos que la tasa sea corresponsabilizada en la financiación con la comunidad autónoma, porque hay ayuntamientos que tienen que recoger en los residuos no solo lo que genera ese propio ayuntamiento sino lo que produce el Valle del Nalón o la Cuenca del Narcea. Es incomprensible que la administración autonómica no lo acoja como un problema de todos los asturianos, es un problema que un municipio pequeño no puede solventar. Exigimos que haya una solución», recalca Triguero.
El diputado Ovidio Zapico se suma a la llamada de auxilio, «Asturias está a menos de 20 días de tener encima un problema medioambiental de enormes consecuencias que afectará a nuestro litoral y un traslado negativo a la industria turística, por ser las playas uno de los pilares de la marca asturiana». Lo que se pide es la cotutela entre Principado y ayuntamientos.
Desde Consejería de Medioambiente les alientan a hacer la limpieza a mano, lo que supondría un problema mayor, tanto por los efectivos y maquinaria necesaria como por el tiempo. Las playas podrían seguir llenas de residuos cuando los primero turistas empiecen a llegar si no se pacta una solución compartida.