Tres generaciones y un único objetivo: la lucha de la mujer obrera

Claudia Granda OVIEDO

OVIEDO

Laura García, técnico de rayos del HUCA; Concha Masa, diputada de IU en la Junta General y profesora de Uniovi; Carmen Garrido, activista y militante de IU y CCOO y Alejandra Matallanas, periodista y responsable del área de Igualdad de IU
Laura García, técnico de rayos del HUCA; Concha Masa, diputada de IU en la Junta General y profesora de Uniovi; Carmen Garrido, activista y militante de IU y CCOO y Alejandra Matallanas, periodista y responsable del área de Igualdad de IU

El área de igualdad de Izquierda Unida abre el debate de la igualdad y la situación de la mujer en el mundo laboral y obrero

31 oct 2018 . Actualizado a las 09:00 h.

Cuando Carmen Garrido (activista, militante de IU y afiliada a CCOO) comenzó a trabajar a Ensidesa allá por el año 1957 la problemática del género iba mucho más allá de la brecha salarial. En primer lugar lugar, las mujeres no podían permanecer en el trabajo si estaban casadas, únicamente la soltería les podía hacer mantener sus puestos, que eran limitados. Mecanógrafas, secretarias o personal de limpieza. «Como las mujeres teníamos un techo de cristal no podías promocionar a trabajos de mayor responsabilidad». Así lo contaba durante el coloquio «Mujer y lucha obrera» organizado por Izquierda Unida, moderado por la responsable de igualdad de IU Alejandra Matallanas, junto a la diputada de IU y profesora Concha Masa y Laura García, técnica de rayos en el HUCA. Tres generaciones de mujeres que, a pesar de haber experimentado una evolución en sus sectores, caminan de la mano hacia una igualdad plena.

La Universidad no es para Concha Masa un ámbito tan duro de allanar como lo fue para Carmen. Tal vez por el salto generacional, tal vez por el sector del que se trata. «Los accesos a estos puestos se llevan a cabo por criterios de méritos totalmente objetivos pero lo que sí se nota de manera global es el efecto tijera», explica la diputada. Actualmente son las mujeres las que destacan durante los primeros años de universidad pero, a medida que pasa el tiempo, se reduce la posibilidad de ascender y se ven relegadas a puestos inferiores. Es aquí donde entran cuestiones como la conciliación laboral. «En ámbitos como la investigación, tras épocas de menor producción como, por ejemplo, durante la maternidad, es muy difícil poder recuperar ese tiempo», añade Masa.

Las tras mujeres coincidían durante el coloquio de la gran herramienta que supone para todas el Movimiento Feminista. «Las mujeres del siglo XIX y XX han marcado hitos en la historia de los derechos de la mujeres y de los derechos obreros», aseguraba Concha Masa destacando la huelga de trabajadoras de textil de 1908 que pone fecha al Día Internacional de la Mujer. Sin olvidarse de destacar el gran hito que supuso la movilización del 8 de marzo de este año, que las tres mujeres han querido ensalzar. «Ha supuesto valor, captación de personas y ha sentado las bases para el resto de movilizaciones», aseguraba Carmen Garrido.

Y es que la participación de la mujer tanto en movilizaciones como en distintas organizaciones es para todas fundamental. La veterana activista insistía en la necesidad de paridad en los órganos de participación. «¿Por qué los secretarios generales tienen que ser siempre hombres?», preguntaba animadamente. «Hay mujeres preparadas para serlo». Una pregunta que respondía la técnico de rayos Laura García. «Cada vez hay más delegadas y sindicatos encabezados por mujeres», celebraba. Para Concha Masa la principal problemática hoy en día es la existencia de micromachismos, los cuales, asegura, siguen vigentes en todos los ambientes y es necesario combatir. «Es muy importante que reivindiquemos nuestra visibilización, no se nos regala nada».

«¿Hacia dónde tienen que ir los retos de la mujer en el mundo laboral?», les preguntaba la moderadora. Para Laura García la sanidad debe centrarse en la conciliación familiar, el techo de cristal y la igualdad salarial. Carmen Garrido cree que es fundamental promover la participación. Pone de ejemplo los problemas del sistema público de pensiones. «Veo necesario que, ahora que han aparecido nuevas plataformas, se unifiquen fuerzas. Lo contrario es una alegría para la brecha. Centra también sus palabras en la necesidad de romper la brecha salarial que, asegura, «continúa en la jubilación y no da para vivir con dignidad». 

«La visibilización de las mujeres es fundamental y la responsabilidad es nuestra», continuaba Concha Masa, que centraba su discurso en el ámbito educativo, insistiendo en la importante labor que hay que hacer con las nuevas generaciones. «Lo primero que rompería son los colegios que segregan por sexos. Permitir esto es una auténtica vergüenza», denunciaba.

El cierre de Alcoa y el fin de la minería

Durante el coloquio también hubo tiempo para tratar temas tan recientes como es el cierre de Alcoa. La moderadora, Alejandra Matallanas, quiso saber cuál es la opinión de la mujer sobre estos temas. «Supone daños irreversibles, tenemos que tener en cuenta que son empresas fundamentales en nuestra región», aseguraba Laura García. 

El discurso de Carmen Garrido resultó mucho más tajante. «Yo no me creo que Alcoa se vaya a cerrar si lo trabajadores somos capaces de permanecer en la calle. Llamadme ilusa. Tenemos que tener la capacidad suficiente para hacer que alguien se ocupe de la empresa», afirmaba. Un comentario muy aplaudido por los allí presentes. «Es vergonzoso que después de tantos años haya dejado caer las instalaciones y ahora diga que están obsoletas. Se quiere ir de rositas y de eso nada. ¿Solo hay dinero para salvar a la banca?», añadía.

Concha Masa, por su parte, se mostraba partidaria de la nacionalización de sectores estratégicos y en la creación de cooperativas. «En manos de multinacionales codiciosas es de esperar que se produzcan situaciones como estas», explicaba. «Hay muchos temas que afectan por igual a la clase trabajadora por eso creo que hay que identificar bien al enemigo y hacer un frente común entre hombres y mujeres».