Nueve acusados han sido declarados culpables de gestionarles trabajos falsos como empleados de hogar para facilitar su entrada en España, y se han retirado los cargos contra otras tres acusadas
18 feb 2019 . Actualizado a las 13:18 h.La Fiscalía ha retirado hoy los cargos contra tres de los doce acusados de gestionar contratos irregulares a ciudadanos pakistaníes y ha sustituido las penas de cárcel que solicitaba, de entre 8 meses y cinco años y diez meses, por multas de entre 270 y 3.510 euros para los nueve procesados restantes. En el juicio celebrado en el Juzgado de lo Penal número 2 de Oviedo, en el que una procesada no ha comparecido, ocho acusados se han declarado culpables de gestionar trabajos falsos como empleados de hogar a ciudadanos pakistaníes para facilitar su entrada en España y otros tres han proclamado su inocencia.
Los ocho acusados que se han declarado culpables han reconocido que presentaron en la Delegación de Gobierno solicitudes de permiso de trabajo y residencia para ciudadanos pakistaníes, como empleados del hogar internos. Una de las acusadas que ha mantenido su inocencia ha afirmado que presentó la oferta para que la hermana del propietario de un restaurante pakistaní ubicado en Oviedo trabajara como interna en la casa de sus padres y que al ser este hostelero -también acusado- «impecable» no dudó que también lo sería su hermana.
Esta acusada, M.B., que ha dicho que es «rotundamente inocente», ha justificado que la empleada no estuviera empadronada en el domicilio de sus padres porque «ya estaba empadronada en otra casa porque ya llevaba tiempo aquí» y ha dicho que trabajó «un par de meses» hasta que un día pidió un permiso y no regresó.
Otro acusado, J.E., ha incidido en que él presentó la oferta para hacer «un favor» a su vecino -el hostelero acusado- y ha admitido que el empleado nunca llegó a prestar servicios, si bien nunca llegó a saber que su domicilio constaba en el padrón de muchos de los pakistaníes que llegaron a Asturias por este sistema. Tras su declaración, la Fiscalía ha retirado los cargos contra tres acusadas, las dos mujeres que declararon su inocencia y la madre de una de ellas que no compareció en el juicio y mantiene la acusación contra J.E.
Los policías han coincidido en señalar que en todos los casos figuraban los mismos domicilios de empadronamiento, los mismos teléfonos y hacían constar las mismas sucursales bancarias y se daba la circunstancia de que «había una gran demanda de pakistaníes que además no hablaban castellano», lo que llamó su atención. Además, según la versión policial, los empleadores tenían incluso relación o vínculos con uno de los acusados, que regenta un restaurante en Oviedo.
La causa estuvo paralizada en Instrucción, sin causa justificada desde el mes de junio de 2011 a abril de 2012, desde mayo de 2012 a octubre de 2014 y desde 25 de agosto de 2016 a 27 de enero de 2017, por lo que la Fiscalía aplica la atenuante de dilaciones indebidas.