Se alquila piso... a inquilinos sin mascotas y sin niños

Carmen Liedo REDACCIÓN

OVIEDO

Una mujer observa los anuncios de pisos de alquiler
Una mujer observa los anuncios de pisos de alquiler PACO RODRIGUEZ

Los propietarios de viviendas plantean restricciones y vetos pese a que no pueden incluirse en los contratos por ser cláusulas tan imposibles como ilegales

02 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando alguien va a una inmobiliaria en busca de un piso para alquilar expone al comercial de la agencia las características que le gustaría que tuviera en función de sus necesidades. El caso es que, en no pocos casos, el propietario de la vivienda ya ha planteado por adelantado sus vetos específicos a los inquilinos que puedan estar interesados en ella. Una de las claúsulas más usuales, que hasta suelen recogerse en los contratos, es la prohibición de que el arrendatario tenga mascotas, aunque hay condiciones también para las personas, bien por su sexo o por ser extranjeros. «Es doloroso, pero habitual», comenta Rubén Fernández de Inmogestión, quien en sus años de experiencia se ha encontrado con arrendadores con restricciones tan particulares como «que no tengan niños». Argumenta que en algunos casos es porque los propietarios de la casa «han tenido malas experiencias» y, en otros, «por temor a que los niños pinten las paredes».

La gerente de la Agencia Asturias, Verónica Álvarez, asegura que hay propietarios que acuden con condiciones y vetos «de todo tipo», desde «restringir que el inquilino tenga mascotas» a que «no tengan niños pequeños» o «que no sean extranjeros», aunque a este respecto explica que después hay arrendadores que hacen diferenciación en función del país de procedencia del interesado: «Si son alemanes o americanos, entonces sí, si son rumanos, por poner un ejemplo, entonces no».

Estas condiciones las achaca al miedo «a que los extranjeros no paguen» o «a que puedan generar desperfectos, pero pasa lo mismo con los niños pequeños, por si estropean paredes o suelos». «Son casuísticas que no tienen por qué pasar, pero los propietarios tienen el temor», señala.

Los pisos pequeños, mejor para chicas

Otras condiciones particulares con las que se ha encontrado en su experiencia en el sector inmobiliario es que en los pisos pequeños, de 35 o 37 metros cuadrados, los arrendadores prefieren alquilar a una chica o a una sola persona sin pareja. «Prefieren a las chicas y no a los chicos porque piensan que van a cuidarlo más», aunque después no haya certeza de si va a ser así o no.

Otra restricción habitual es para los músicos profesionales, «porque pueden surgir problemas si ensayan con la comunidad de vecinos». Según la gerente de la Agencia Asturias, «son condiciones que quedan fuera del contrato», aunque los propietarios piden que las tengan en cuenta a la hora de hacer una selección. No obstante, Verónica Álvarez apostilla que la experiencia que tienen ayuda a que en ocasiones consideren que una persona que no cumple el perfil del propietario «va a ser un buen inquilino, así que se lo comentas al propietario».

Rubén Fernández, de Inmogestión, traslada que el veto a las mascotas es el más habitual y ve paradójico que sea en Gijón, una ciudad con un abultado censo de animales de compañía, donde más difícil es alquilar un piso si tienes uno. Añade que los condicionantes para los extranjeros también se dan, «aunque cada vez menos», asegurando que el problema «no está en el origen, sino en la persona en sí misma, y hasta el inquilino que cobra 3.000 euros deja de pagar».

 Rechazo a las claúsulas imposibles

En Degraín Inmobiliaria, agencia con experiencia de varias décadas en Oviedo, aseguran que los propietarios si plantean en muchas ocasiones un perfil ideal de inquilino pero matizan que «después no siempre se tiene en cuenta si el perfil de la persona interesada es bueno» y que «no por eso dejan de alquilar». «Nosotros tenemos herramientas y experiencia para asesorar», indican. No obstante, en esta inmobiliaria matizan que cuando los vetos resultan imposibles «no cogemos el alquiler de esa vivienda porque puede generar problemas con el cliente» pese a que aseguran que solicitan «muchos papeles y justificantes de ingresos» a fin de que «la operación sea segura» y el propietario de la vivienda pueda realizar un seguro.