Podemos llevará a ayuntamientos de todo el país mociones contra el regreso del callejero franquista en Oviedo

La Voz

OVIEDO

Un trabajador coloca las placas de la calle Federico García Lorca y de la plaza Fresno, en Oviedo, en aplicación de la Ley de la Memoria Histórica
Un trabajador coloca las placas de la calle Federico García Lorca y de la plaza Fresno, en Oviedo, en aplicación de la Ley de la Memoria Histórica ELOY ALONSO

Los morados cargan contra el consistorio y el Gobierno del Principado por no respetar la ley de memoria histórica

30 mar 2021 . Actualizado a las 13:08 h.

Ayuntamientos como los de Barcelona, Valencia, Cádiz o Rubí, así como otros municipios de Asturias impulsarán mociones en «apoyo a los demócratas ovetenses» y de repulsa por la vuelta de nombres vinculados al franquismo a las calles de la capital del Principado, ha anunciado Podemos, que ha culpado de esta situación al alcalde, Alfredo Canteli, del PP, y al presidente del Principado, Adrián Barbón, del PSOE.

Según el diputado regional de Podemos, Rafael Palacios, y la portavoz de Somos en el Ayuntamiento de Oviedo, Ana Taboada, tan culpable es quien vulnera la Ley de Memoria Democrática aprobada por el parlamento autonómico hace dos años, como quien lo consiente por lo que, según ambos políticos, tanto Canteli como Barbón deberían hacer frente de sus bolsillos las sanciones que puedan derivarse.

En rueda de prensa, Palacios ha asegurado que si Oviedo cuenta de nuevo en 17 de sus calles con nombres vinculados al franquismo se debe a la «falta de voluntad política, decisión y protagonismo» de Barbón, al que ha responsabilizado de no hacer cumplir la ley y de consentir que, desde el Ayuntamiento de Oviedo, el PP y Ciudadanos «escupan sobre la memoria» de miles de personas asesinadas y de sus familias.

«En Oviedo, tras cincuenta años de democracia, se vuelve otra vez a poner nombres de colaboradores de asesinos con la colaboración del PP y Ciudadanos», ha subrayado Palacios, que ha anunciado que presentará en la Junta General del Principado una batería de preguntas sobre el «callejero franquista», la primera de ellas en el primer pleno parlamentario de abril.

En concreto, pedirá al Gobierno que explique qué «medidas urgentes» pretende llevar a cabo para que el Ayuntamiento ovetense cumpla con la obligación de retirar símbolos franquistas que prevé la Ley de Memoria Histórica.

El Ayuntamiento de Oviedo justificó la restitución del antiguo callejero sobre la base de una sentencia de un juzgado contencioso administrativo de Oviedo que decidió no recurrir y que consideró nulos los cambios de denominación realizados por el anterior gobierno municipal -PSOE, IU y SOMOS- en 2019 en cumplimiento de la ley nacional de Memoria Histórica, anterior a la ley autonómica.

Según Taboada, después de más de un año desde que entró en vigor la ley asturiana de Memoria Democrática, el Ayuntamiento sigue sin cumplir con ella y mantiene nombres en las calles de la capital de gente «que prestó servicio al franquismo vulnerando los derechos de la gente».

Tras preguntarse si Barbón es «socialista de corazón y defiende la democracia», la portavoz de Somos en el Consistorio ovetense ha hecho un llamamiento al presidente y al alcalde para que «dignifiquen el espacio público» y ha anunciado que desde distintas corporaciones municipales de otros puntos de España se han puesto en contactos con ellos para expresarles su apoyo.

La Ley de Memoria Democrática aprobada en 2019 prohíbe expresamente incluir en el callejero asturiano nombres que exalten al franquismo, a sus dirigentes o a las organizaciones que sustentaron la dictadura y está tramitando la contratación de un grupo de expertos «plural e independiente» para elaborar un estudio sobre la vinculación con la dictadura de personas que dan nombre a vías de la región.

El artículo 48 de la Ley señala que será considerada contraria a la memoria democrática y a la dignidad de las víctimas «la exhibición pública de escudos, insignias, placas y demás objetos o menciones, como el callejero, inscripciones y otros elementos adosados a edificios públicos o situados en la vía pública, realizados en conmemoración, exaltación, legitimación, justificación, enaltecimiento individual o colectivo del golpe militar de 1936 y del franquismo»; según recogió EFE.