El acusado afirma que la droga no iba destinada al tráfico sino que junto a otros cuatro amigos reunieron el dinero para la compra del hachís
02 jul 2021 . Actualizado a las 16:45 h.La Fiscalía solicita una pena de dos años y seis meses de prisión y multa de 10.922 euros a un acusado al que incautaron un kilogramo de hachís dentro de dos bloques de cinco pastillas de hachís cada uno con el dibujo de una hoja de marihuana y el texto «Chapo» en alusión al apodo del narcotraficante mexicano Joaquín Guzmán.
La Fiscalía asegura en su escrito que el acusado, J.G.R., el pasado 18 de noviembre portaba en el interior de la chaqueta dos bloques de cinco pastillas de hachís que arrojaron un peso de 989,4 gramos de resina de cannabis.
La droga le fue incautada cuando se encontraba en la calle Argañosa de Oviedo y, según el relato fiscal, estaba destinada al tráfico ilícito a terceras personas. La Fiscalía calcula que la droga interceptada hubiera alcanzado un precio de 5.461 euros en el mercado negro. El Ministerio Fiscal imputa al acusado un delito contra la salud pública en forma de sustancias que no causan grave daño.
El abogado defensor, Alfredo García Montes, niega rotundamente el relato de la Fiscalía y, según su escrito de calificación, la sustancia incautada no iba destinada al tráfico ilícito a terceras personas sino que él junto a otros cuatro amigos reunieron el dinero para la compra del hachís.
Según la versión de la defensa, al ser el acusado quien fue a adquirir esta sustancia puso menos dinero, ya que no trabajaba y una vez adquirida la droga, los 10 bloques de hachís incautados se lo iba a repartir entre los 5 amigos a 2 bloques por persona.
Los dos bloques que le tocaban al acusado, según la defensa, iban a ser destinados exclusivamente al consumo propio al ser consumidor habitual de esta sustancia. La defensa impugna expresamente el informe de valoración de la sustancia incautada y pide la libre absolución al negar que su representado cometiera delito alguno