Expertos del Departamento de Geología de la Universidad de Oviedo y la empresa GEA Asesoría Geológica han estudiado las características de las rocas de la capital asturiana, así como su resistencia frente al paso del tiempo y los métodos y tratamientos de restauración que necesitan
20 oct 2025 . Actualizado a las 11:18 h.Expertos del Departamento de Geología de la Universidad de Oviedo y la empresa GEA Asesoría Geológica han estudiado las características de las rocas que componen el 'Oviedo histórico', así como su resistencia frente al paso del tiempo y los métodos y tratamientos de restauración que necesitan.
La investigación, publicada en la revista 'Geoheritage', pretende detallar la composición de las principales piedras de los edificios como la catedral de San Salvador, las iglesias de Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo o el palacio de Valdecarzana-Heredia, a fin de conocer su estructura para favorecer su conservación.
El profesor del Departamento de Geología de la Universidad de Oviedo, Víctor Cárdenes Van den Eynde, ha explicado que el siguiente paso es la propuesta de la piedra de Oviedo como Piedra de Patrimonio Mundial, «distinción que otorga la Unión Internacional de Ciencias Geológicas (IUGS, por sus siglas en inglés) a las rocas singulares con las que se han construido los edificios más representativos de la humanidad, como el Taj Mahal en India o el Vaticano en Roma».
Caliza de Piedramuelle
El 'Oviedo histórico' está construido con caliza de Piedramuelle, de tono amarillo o rojizo y la dolomía de Laspra, de colores grises claros. Ambas, explica la institución académica, son rocas carbonatadas, con unas propiedades estéticas «únicas» que pueden sufrir cambios y alteraciones a lo largo del tiempo. A cambio, son piedras fáciles de trabajar tanto desde el punto de vista arquitectónico como artístico, lo que permite obtener formas y volúmenes singulares.