El encuentro de octavos de final que medirá esta noche a Uruguay y Portugal puede definirse como un duelo entre dos selecciones que durante el presente campeonato están ofreciendo mejores resultados que sensaciones.
Las dos se han clasificado con absoluta justicia, pero no han brillado en todos sus partidos. Sin embargo, llegados a este punto, creo que aquel equipo que supere esta eliminatoria en un Mundial pasa a ser candidato al título. Porque si superas a tu rival tienes los kilates suficientes para todo.
En este caso se nos presenta un partido de trámite y resultado incierto para los uruguayos. Nos toca el campeón de Europa. Una selección que tiene en sus filas el que para unos es el mejor jugador del mundo. No sé si tanto, pero sí que todos coincidiremos que uno de los más grandes lo es. En cualquier caso es un plus que tiene Portugal. Pero su equipo no es solo Cristiano Ronaldo. Uno se para a pensar los jugadores lusos y le salen unos cuantos de primerísimo nivel.
En este torneo, Portugal ha tenido de todo. Momentos buenos y otros no tanto. Es más, si Irán hubiese hecho un poquito más, pues ahora quizá sería nuestro rival de octavos. Pero el fútbol es lo que es y no lo que nos imaginamos, así que están aquí y con todo el mérito del mundo. Tampoco Uruguay lo ha bordado. Sí que contra Rusia hizo un partido buenísimo. Cierto que se le puso de cara muy pronto y hubo una expulsión pero eso también es parte del juego, no debe restar mérito.
Imagino que jugaremos un poco fútbol control, a esperar. Pero cuidado con dónde aguardamos. No podemos meternos muy atrás, lo justo para que Suárez y Cavani tengan espacio para correr y buscar la espalda de Pepe, un enorme central, pero al que los años le han hecho perder velocidad.