Los rojiblancos vuelven a ser competitivos tras su visita al Real Madrid
28 nov 2016 . Actualizado a las 13:12 h.1. La actitud vuelve a ser de hierro. El Sporting se vio con un 2-0 en contra frente a un equipo que cuando húele sangre acostumbra a machacar para agrandar el ego personal de sus estrellas. Sin embargo, siguió intentando hacer su trabajo vehementemente, yendo de menos a más hasta que el partido se puso de cara
2. El nuevo sistema de juego ya da frutos. Es complejo, posiblemente uno de los más complicados para adaptarse, pero ya da rendimiento a la hora de rescatar jugadores como Douglas o Carmona, que pueden ser importantes a partir de ahora. El Sporting remató el doble de veces que la pasada semana, llegó al área en 20 oportunidades por 22 del Real Madrid y sacó un córner más que los de Zidane
3. Cambio de discurso. Jugadores y cuerpo técnico reconocieron públicamente y en el vestuario que, como mínimo, la imagen era considerablemente mejorable y siempre hay que presentar resistencia al oponente por respeto a los aficionados, sea cuál sea su nombre o palmarés..
4. El calendario no ha sido el más propicio. Todos juegan contra todos, pero los rivales sportinguistas han llegado generalmente en un buen momento o intento de reacción, como en el caso de Granada y Valencia después de despedir a su anterior técnico. Quedan 6 jornadas para acabar la primera vuelta y todos los encuentros parecen sobre el papel asequibles. El más complicado será contra el Villarreal en Gijón, con lo que las fuerzas se pueden igualar por el factor campo; si bien es cierto que los hombres de Roig no llegarán a El Molinón después de jugar un jueves en Europa League, aspecto que ha beneficiado al Alavés este fin de semana por ejemplo.
5. El peor Sporting posible depende de si mismo para salir del descenso. Se encuentra a 1 punto del Deportivo y 2 del Valencia, rivales contra los que habrá un partido directo en la segunda vuelta, por lo que está en su mano revertir la situación y no dependen de nadie para lograrlo.