El árbitro del Sporting-Numancia se ganó una estancia en la nevera

Nacho Pérez

SPORTING 1905

Sus decisiones marcaron el encuentro de Copa del Rey

20 sep 2017 . Actualizado a las 17:47 h.

El arbitraje del guipuzcoano Aitor Gorostegui Fernández-Ortega es de los que resulta imposible encontrar una justificación. Errores groseros casi de continuo a lo largo de los 120 minutos, en los que tuvo que dirigir un partido de Segunda División en el que siguió por la misma línea de la pasada temporada. Una línea marcada por la polémica y por un alto porcentaje de inoperancia para tener un partido controlado. Las jugadas polémicas y los errores, son en muchas ocasiones cuestión de fortuna mientras no se quiera implantar la tecnología en este país. Pero a un colegiado de este nivel, o al menos el que se le presupone, no se le puede escapar un partido sencillo como el de ayer.

Porque fue un partido sencillo en el que bastaba con tener el más mínimo criterio en la señalización de infracciones. Pero este fue variando poco menos que según soplaba el viento. Y en esta circunstancia de criterio cambiante el Sporting sí que pudo verse beneficiado. Fue tras un agarrón de Álex Pérez que no señaló ni falta y que facilmente hubiese podido haber supuesto una tarjeta roja. Minutos después en un agarrón similar, sin llegar a ser ocasión manifiesta de gol, sí fue castigado con falta y la consiguiente amonestación.

La lista de equivocaciones en contra del Sporting no es pequeña. Su asistente nº1 comete un grave error al señalar un fuera de juego con 1-0 en el marcador que con altísima probabilidad hubiese supuesto el 2-0. Porque mención especial merecen los asistentes, si Gorostegui estuvo mal, sus asistentes peor. Especialmente el nº1 por la banda de banquillos, con errores de bulto durante todo el partido.

El penalti señalado a Xandao no merece otra catalogación que de auténtica tomadura de pelo. Pasadas muchas horas desde el partido, no sé como pudo ver mano cuando el balón impacta claramente en la cabeza. Desconozco si el Sporting recurrirá la tarjeta amarilla al central brasileño, pero es un recurso que si se interpone está ganado de antemano a vista de las imágenes de TV.

La lista de errores continua como la inexistente falta que le señalan a Alex López dentro del área al disparar y que tras un error de Munir hubiera supuesto un segundo gol rojiblanco. También se reclamaron dos penaltis en el área numantina. Uno por mano, que existe, cortando un remate en un saque de esquina y otro por un derribo, si no me equivoco a Carlos Castro, al que se le impide llegar a un balón.

Para finalizar, Gorostegui no es que merezca un suspenso por lo de ayer. Es que debería estar una buena temporada en esa famosa nevera arbitral que dicen existe.