El malagueño podría debutar en una citación con el primer equipo. Álex Pérez quiere estar y se probará en Mareo
18 mar 2018 . Actualizado a las 12:14 h.Nunca una convocatoria había generado tanta expectación. Al Pipo Baraja se le ha complicado la semana con una inoportuna plaga de lesiones que ha dejado la zaga huérfana de fichas del primer equipo. El técnico rojiblanco tiene previsto realizar una última prueba en la sesión matinal de hoy, domingo, donde examinará el estado físico de los tocados. La previsión es que la zaga sea revolucionaria con Juan Rodríguez, en plenas condiciones, y el cántabro Guitián, que es el mejor situado entre los lesionados. La ausencia del tándem titular abre una vía a Víctor Ruiz, indiscutible en el filial.
El central malagueño ha completado la semana con los mayores y tiene muchas papeletas de debutar en una citación con el primer equipo. Ayer José Alberto López, técnico del Sporting B, ofrecía la convocatoria del filial con vistas al encuentro de hoy ante el Burgos con dos ausencias destacadas: Víctor Ruiz y Nacho Méndez. Ambos se entrenarán hoy con el primer equipo y, salvo sorpresa, viajan mañana.
Esfuerzo de Álex Pérez
Unas de las noticias positivas está en la mejoría de Álex Pérez. El madrileño, que se marchó de Sevilla con una doble fisura craneal, está adelantando todos los plazos y ha participado ya junto al grupo con una protección craneal. El central se probará en la sesión matinal de hoy y se consensuará una decisión. Todo apunta a que será baja.
Incluso más complicado está jugar para Fede Barba. El romano, que fue sometido a una resonancia, no presenta una lesión de gravedad pero tiene un edema que complica su presencia en Huesca. Con más optimismo se vislumbra el futuro inmediato para Guitián. En el club han tratado de cuidar al cántabro ante la epidemia central y su participación, con lógicas molestias, parece segura. Quien seguro que estará es el gallego Juan Rodríguez. El cedeirés ha salvado de pie la fiebre y apunta al once.
Viaje el lunes en chárter y regreso el martes
La previsión es que la plantilla viaje en la misma mañana del lunes a Huesca. Los rojiblancos harán noche en la ciudad oscense y regresarán a tierras asturianas en la tarde del martes. El Pipo tiene un entrenamiento para decidir su plan: si arriesga, con quién, o si prefiere ser cauto. Todos quieren estar en un partido que podría marcar las aspiraciones en el último tramo de competición pero solo Pipo decidirá.
