Análisis táctico del Sporting-Granada
28 may 2018 . Actualizado a las 20:06 h.Llegó la primera victoria tras un mes lleno de derrotas, algunas de forma injusta en el computo global, pero en la rula no preguntan, apuntan, como se suele decir en Gijón.
El Real Sporting de Gijón, ya es equipo de Playoff, lo era virtualmente desde hace varias semanas, pero ahora es oficial. Por lo que llegar con buenas sensaciones a la postemporada regular se antoja clave y ayer se dio el primer paso, sumando los tres puntos frente a un Granada sin confianza, pero con jugadores de calidad como Machis y Adrián Ramos, entre otros.
No hubo ambiente de gala en El Molinón - Enrique Castro Quini, que no llegó a los 20.000 espectadores por la ausencia de mas de 5.000 abonados, pero los jugadores rojiblancos salieron concentrados y se exprimieron hasta el último segundo como si de una final se tratase, mientras Rubén Baraja les observaba sancionado desde la grada -todavía le quedan dos encuentros más-.
La propuesta inicial
El técnico rojiblanco apostó por el llamado once de gala, con la única novedad de Alberto Lora en el lateral diestro en detrimento de Jordi Calavera, una variante que se venía probando en Mareo desde hace dos semanas y que más allá del gol anotado para abrir la lata, salió bien en el computo global. Los años pasan por el jugador en lo físico, pero su sentimiento de pertenencia y pelea constante se nota en cada momento, incluso ganó algún dos contra uno de cabeza pese a su baja estatura. Sin lugar a dudas, el carril diestro será una de las dudas durante el Playoff en el once sportinguista.
Otra mención especial se la lleva Michael Santos, que volvió a salir del terreno de juego antes de tiempo por una sobrecarga provocada por su gran desgaste. En estos momentos es el faro del equipo y una bendición para el cuerpo técnico, más allá de su obra de arte regalando el primer tanto, que la estrella de tu vestuario sea el primero en morder durante la presión, así como el primero en tirar desmarques y pelear cada despeje de la defensa rojiblanca, es un lujo que ayudar a sacar las mejor versión de sus compañeros.
Más centrados en lo puramente táctico, el Sporting fue superior en el grueso del encuentro, a excepción del comienzo de la segunda parte, en la que el Granada hacia flotar a varios hombres entre las líneas de la delantera y el doble pivote sportinguista, al que intentaban a su vez hacer movimientos de arrastre para atacar su espalda. Una estrategia de superioridad por acumulación que ya utilizó López Garai con éxito en Gijón, en la que priman los pases de seguridad a pocos metros y ante los que baja la confianza del Sporting por no tener acceso a la recuperación de balón. Desde el banquillo se corrigió retrasando la primera línea de presión para juntar a los futbolistas y realizando cambios para dotar de mayor oxígeno al sacrificio defensivo.
En el aspecto de la preparación del partido, se notó un buen dispositivo para frenar las arrancadas de Machis mediante coberturas defensivas que lo tuvieron desactivado.
Los cambios fueron interesantes
Pablo Pérez, entró por Rubén García para buscar la superioridad física en el mediocampo y además de su trabajo defensivo, tuvo ideas interesantes que llevaron peligro. Siempre deja la sensación de que las ganas por no cometer errores que le provoquen pitadas de la grada le lleva a jugar al 70% de su potencial de ataque.
Álex López, entró por Santos en un cambio claramente defensivo y cumplió su misión de acumular hombres por dentro. Además se intercambiaba por Pablo Pérez en ocasiones para presionar al central en la salida de balón.
Calavera, salió al final del partido en un hombre por hombre por Alberto Lora, que ya acusaba el cansancio después de muchas semanas sin ser titular.
Balón parado
Se volvió a marcar un gol desde el saque de esquina después de intentarlo sin éxito en una abultada racha negativa durante el último mes. La pareja de oro fue la formada por Carlos Carmona y Fede Barba. De hecho, el 10 del Sporting casi mete el gol del año minutos después al rematar una chilena imposible tras el saque de Jony.
A nivel defensivo, el gol encajado llegó por un córner mal defendido, en el que cabe reseñar que hay una posible falta sobre el Sporting al derribar a un futbolista en mitad de la estrategia para liberar al rematador.
Nota final para Baraja y su cuerpo técnico
Notable. Ayer se estrenó su segundo entrenador en El Molinón, José Ramón Rodríguez, con Baraja sancionado y estuvo muy activo desde la banda. Además los cambios tuvieron sentido y fueron positivos.
