Crónica: El Sporting renace fiel al estilo de Baraja

Andrés Menéndez

SPORTING 1905

Álvaro Jiménez celebra un gol
Álvaro Jiménez celebra un gol

El Sporting gana (1-0) a Las Palmas y se reencuentra con su mejor versión. El equipo compitió fiel a lo que busca el entrenador

29 sep 2018 . Actualizado a las 21:31 h.

A veces se necesita reflexión para volver a empezar. La crisis tras el descanso de Pamplona fue un directo a la ilusión y a la credibilidad de este inicio de proyecto. El Sporting ganó (1-0) ante Las Palmas y se regeneró. Baraja cambió la formación y se vio a un equipo maduro, hecho, gladiador y veterano. Este sí es el equipo que quiere su entrenador.  Un renacimiento necesario ante un rival de envergadura. Antes del inicio de encuentro se guardó un respetuoso minuto de silencio en memoria del padre de Carlos Carmona. A su vez, la plantilla portó brazaletes negros en señal de luto. 

Cambio táctico y debut de Peybernes

Las malas sensaciones siempre invitan a una reflexión. De mayor o menor calado. El día uno post Pamplona amenazaba a revolución; después, ya más en calma, la transformación fue menor y se quedó en un giro táctico que es como un viaje en el tiempo. Baraja recuperó el 4-2-3-1; ese mismo sistema que le llegó a colocar líder en el último curso de competición. La variante sacudió las expectativas de Cris Salvador, poco culpable pero expuesto por la condición de aprendiz y por la intención del cuerpo técnico de disponer de jugadores más veteranos en el inicio y, también, ofensivos en el banquillo cuando toca jugar en El Molinón. Las dos principales novedades estaban en el debut de Peybernes y el acomodo de Lod en una situación más centrada, como figura de diez y con Cofie y Sousa en la sala de máquinas.

Babin se lesiona; Álex Pérez titular.

Un cuarto de hora antes del inicio de encuentro Babin hacía saltar todas las alarmas. El francés, con rostro serio, encaraba los vestuarios. Álex Pérez calzaba el peto verde y se juntaba a Peybernes en las acciones de calentamiento. Unos problemas gástricos impedían al internacional por Martinica actuar. Mathieu Peybernes debutaba acompañado por el jugador al que minutos antes reemplazaba en el once: Álex Pérez. 

Lod marca las diferencias y Jiménez hace el gol

Las Palmas no tardó en evidenciar que es, hasta ahora, el equipo con más argumentos que ha visitado El Molinón. Tienen gente por dentro con calidad, jugadores con oficio y a un depredador del gol. El Sporting trataba de responder proponiendo un fútbol control, bajo en pulsaciones y en ritmo. Músculo y orden para mandar. Una vacuna a la idea de los canarios.

El juego nacía y crecía en el centro del campo. Ahí Sousa, Cofie trataban de vencer por supremacía física ante los jugones canarios. Entre la igualdad llegó una jugada de talento diferencial. Robin Lod, cerca del área. El finlandés recibió en el costado izquierdo y se inventó una maravilla para regalar a Álvaro Jiménez una situación inmejorable de gol. El jugador con más calidad del Sporting marcaba diferencias.

Carmona falla penalti

La reanudación mejoró al Sporting. El equipo rojiblanco insistía en su juego control pero ahora además asomaba por ataque. Las Palmas decidió tomar riesgos y elevó la presión dejando a la la retaguardia muy expuesta y con espacios. Manolo Jiménez añadió una pizca más con Rafa Mir por Galarreta.

El equipo gijonés vio aire en la espalda de los centrales y tras varios amagos encontró a Djuka lanzado a guarida de Raúl. El serbio, que llevaba todo el partido trabajando como un peón y sin ocasiones de gol, se encontró con el portero canario y el colegiado, Arcediano Monescillo, decidió inventarse un agarrón que no fue de Lemos a Carmona. El mallorquín, lanzó con el alma pero Raúl acertó el lado. El Molinón entendió el contexto y abrazó en un cántico a Carmona.

Djuka y Carmona fuera; Blackman y Nacho dentro

Cada minutos favorecía al estilo que buscaba el Sporting. Las Palmas agotó cambios antes del setenta pero la suma de nombres en ataque tampoco resultó convincente. El partido giraba siempre en dirección a las conductas de André Sousa, ejemplar en la forma de entender el encuentro. Baraja dio descanso a un cansado Djurdjevic y a Carmona. Ambos se fueron ovacionados. El mallorquín, además, recibió el calor de sus compañeros. No fue su tarde pero su ejemplo predica.

 Crecimiento individual; mejora colectiva

Uno de los males del último tramo de competición era el bajón del nivel medio de jugadores llamados a tener más dimensión. Hoy, por el motivo que sea, todos dieron un paso más. Es cierto que el estilo quizás nunca llene a los indecisos pero la forma de competir era distinta. Álvaro Jiménez, ahora sí, fue efectivo y vistoso. Álex Pérez y Peybernes se complementaron a un nivel muy alto. Sousa, como ancla, demostró que tiene pie, visión en largo y energía. Y Lod que cuando le llega, aunque todavía le llega poco, es distinto. El Sporting ganó cuando más lo necesitaba a un equipo mayor y frena la resaca de Pamplona. Renacimiento tras crisis y respuesta coherente en estilo. La rectificación fue un acierto. Ahora toca continuidad.

Alineaciones

Real Sporting de Gijón: Mariño; Molinero, Peybernes, Álex Pérez Canella; Cofie, Sousa; Álvaro, Lod (Santana min 84), Carmona (N. Méndez min 70); y Djurdjevic (Blackman min 67)

Las Palmas: Raúl; Castellano; Cala. D. García, Lemos; Timor, Galarreta (Rafa Mir min 57), Blum (Sakho min 63), Tana (Pekhart min 67); Mesa; Castro

Goles: 1-0 Álvaro Jiménez (min 30)