Marcelino: «Ganar la Copa fue el detonante de la destitución»

La Voz / EFE

SPORTING 1905

Marcelino
Marcelino Ana Escobar

Rueda de prensa de despedida

13 sep 2019 . Actualizado a las 22:30 h.

El técnico asturiano Marcelino García Toral, que el miércoles fue destituido como entrenador del Valencia, se mostró convencido de que no dejar de lado la Copa del Rey y ganarla fue el detonante de que se rompiera la relación de confianza con Peter Lim, propietario del club, y de que le despidiera.

«Estoy seguro, absolutamente, sin ninguna duda, que el detonante de esta situación fue la Copa. Durante la temporada recibimos mensajes directos e indirectos de que teníamos que rechazarla», indicó.

«La afición quería luchar por ella y los futbolistas también y tenían la convicción de ganarla. El cuerpo técnico queríamos luchar y ganar la Copa. Ganar la Copa fue el detonante de esta situación, quién me lo iba a decir», añadió.

El exsportinguista desveló que en Sevilla, tras conquistar el título copero, Lim no les felicitó. «Cuando el 19 de julio fui a Singapur me felicitó por la Champions y no por la Copa, podréis comprender mi sorpresa. Es obvio que los resultados no han estado detrás de mi destitución», apuntó.

García Toral dijo que las razones que le dieron para dejar de lado la Copa fueron «que era una competición menor que podía poner en riesgo objetivos como la Champions». «Pero realmente creemos que la sensación vivida en la Copa tras el partido de Getafe fue determinante en el logro de la Champions».

El entrenador asturiano desveló que ya en la temporada 2017-18 se le planteó un planteamiento similar con la Copa. «Me considero un entrenador ganador, quiero tener, y los he tenido, futbolistas ganadores. ¿El Valencia creéis que puede salir a una competición y no competirla? ¿Sería yo un buen profesional? ¿Como aceptarían mis jugadores que les dijera 'esto no lo competimos?», se preguntó.

Pese a ser consciente de esa situación, el entrenador dijo que cuando le comunicaron el despido «lo primero» que sintió fue «incredulidad».

«No daba crédito, no me lo podía creer. Después de los objetivos logrados no entra dentro de la lógica que este cuerpo técnico, que siempre ha respetado los códigos pactados en mayo de 2017, de repente deje de poder entrenar. Incredulidad e impotencia», definió. 

 Vídeo despedida Marcelino, imágenes de LevanteTV (desde min. 7:25)

Agradecido a sus jugadores

El técnico de Careñes agradeció emocionado y con alguna lágrima el trabajo y el apoyo de los jugadores y acusó a Peter Lim, propietario del club, de haber cambiado, sin decírselo a la cara, el modelo de trabajo que pactaron a su llegada a la entidad.

«Han sido dos años maravilloso en Valencia y en el Valencia. Hemos tenido el privilegio de convivir y disfrutar con un grupo increíble, que nos han hecho campeones de Copa, nuestro primer titulo como cuerpo técnico, consiguiendo dos años seguidos ser cuartos con el premio de la Champions», señaló.

«La despedida fue muy triste pero era lo que llevaba la situación. Por nuestra parte un agradecimiento total. Lo más importante ha sido disfrutar día a día con ellos. Haber salido de los momentos de dificultad. Estarán en mi corazón hasta el último día de mi vida», señaló mientras se le caía alguna lágrima.

García Toral explicó que a principios de julio empezaron a ver situaciones que indicaban «que las formas de trabajo han cambiado». «Pedimos ir a Singapur y se me dice que hay una confianza absoluta en nuestro trabajo, en mí y en el cuerpo técnico, que todo va a seguir igual pero vemos que no es así», señaló.

El entrenador agregó que «se transforman las condiciones pactadas a través del director general y el modelo cambia pero no se nos dice a la cara, como propietario estaba en pleno derecho pero nosotros hubiéramos tenido la opción de decidir si éramos las personas indicadas para seguir en el proyecto».

Ese pacto, desveló incluía «una condición, tener una opinión importante en la confección de la plantilla y decisiva para el 'no', lo demás era todo consenso».

Marcelino salió al paso de un supuesto malestar del propietario por haber intervenido su agente, Eugenio Botas, en muchas operaciones y lo descartó.

«Desde que llegué, el Valencia habrá realizado más de cincuenta operaciones de mercado y mi representante participó en dos, la llegada de Neto y la salida como cesión de Medran al Alavés. Durante estos 26 meses ningún futbolista representado por mi agente formó parte de la plantilla del Valencia, quien dice eso miente», señaló el asturiano que dijo que «es casi una infamia».

García Toral agradeció la confianza del director general Mateu Alemany y dijo que «ha traspasado la relación el proyecto profesional para ser una amistad personal». También admitió que este proceso de desencuentro vivido «no es con el entrenador, ha sido un proceso con el director general». En cambio, no se quiso referir al presidente Anil Murthy.

El técnico desveló que la intención inicial del club fue que dos empleados le llevaran la carta de despido y que Alemany, al ser él quien lo había contratado, decidió comunicárselo personalmente.

El asturiano extendió su agradecimiento a los medios de comunicación, a los trabajadores del club y a la afición. «Nos llevamos el cariño de una gran afición que nos apoyó desde que llegamos y en los momentos de dificultad, que los hubo», apuntó.

«Nos sentimos y sentiremos siempre agradecidos. También contentos de haberles devuelto la ilusión y de haber colocado al club en el lugar que le corresponde», prosiguió.

Preguntado por si volvería a un Valencia que no fuera ya propiedad de Peter Lim, el entrenador dijo que «es indudable que disfrutaríamos volviendo a entrenar al Valencia, es una obra incompleta, nuestra única idea era seguir creciendo».

«El dolor está presente y debemos dejar que el tiempo cure las heridas pero hay que seguir, la vida no para y nuestra manera de sentir la profesión es la misma. Respeto, humildad y honradez. Me voy a apartar un tiempo del escenario publico», concluyó.